Deportes
El fondista orureño Héctor Garibay llegó esta madrugada a París, donde este sábado 10 de agosto desde las 2:00 (HB) competirá en la prueba de maratón en los Juegos Olímpicos 2024, con el objetivo de sorprender y lograr la mejor representación nacional en la cita olímpica.
Desde el inicio, Real Tomayapo demostró su intención de dominar el encuentro. Apenas a los 3 minutos del primer tiempo, Jaime Villamil abrió el marcador, poniendo a su equipo en ventaja. Óscar Leonardo Becerra aumentó la diferencia a los 29 minutos, dejando a Independiente en una situación complicada.
Los arqueros fueron las figuras destacadas de la noche. Diego Méndez, de Royal Pari, realizó cinco atajadas cruciales que mantuvieron a raya los intentos de Oriente Petrolero. No menos importante fue la actuación de Alejandro Torrez, el guardameta de Oriente Petrolero, quien detuvo cuatro disparos del equipo visitante, asegurando así el empate.
Con este resultado, U. de Vinto se mantiene en el cuarto lugar de la tabla con 15 puntos, mientras que San José ocupa la séptima posición con 14 unidades. En la próxima jornada, U. de Vinto visitará a San Antonio Bulo Bulo, mientras que San José recibirá a Always Ready en busca de sumar puntos cruciales en la competición.
Los Juegos Olímpicos de 2024 en París han sido testigos no solo de emociones deportivas, sino también de un brote de amor entre los atletas, con varias propuestas de matrimonio que han capturado la atención de los aficionados de todo el mundo.
Uno de los atletas que más llamó la atención del mundo entero en los Juegos Olímpicos de París 2024 es Yusuf Dikec, el tirador turco que se volvió viral tras ganar la medalla de plata en la prueba de tiro. 
Opinión

El Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión Europea (UE) han cerrado el viernes sus negociaciones para la firma de un acuerdo de asociación que apunta a “crear un mercado de 700 millones de personas”.

Se trata de un logro significativo que evidencia la madurez alcanzada por el Mercosur y perfila ventajosas oportunidades económicas y comerciales para los 32 países —27 europeos y cinco sudamericanos— que involucra la asociación de ambos bloques.

Puntos de Vista

Ha pasado el Censo 2024 y más allá del plausible esfuerzo estatal, de la entrega cívica de los censistas voluntarios y de la participación del soberano (algunos a regañadientes), además de los ingeniosos memes que nos han divertido durante nuestra “detención domiciliaria” (que afortunadamente duró un día), encuentro algo que a esta altura del partido resulta imposible de esconder bajo la alfombra: la profunda desconfianza que el Estado administrado por el Gobierno inspira y merece de la ciudadanía.

Ha pasado el Censo 2024 y más allá del plausible esfuerzo estatal, de la entrega cívica de los censistas voluntarios y de la participación del soberano (algunos a regañadientes), además de los ingeniosos memes que nos han divertido durante nuestra “detención domiciliaria” (que afortunadamente duró un día), encuentro algo que a esta altura del partido resulta imposible de esconder bajo la alfombra: la profunda desconfianza que el Estado administrado por el Gobierno inspira y merece de la ciudadanía.

Los bolivianos hemos llegado al Censo Nacional de Población y Vivienda con más dudas que certezas. Salvo los voceros del gobierno central y sus sectores afines, hoy reducidos a la fracción arcista, la mayoría desconfía de la transparencia del proceso iniciado a fines de 2022, a tropezones y sólo por la presión ejercida casi exclusivamente por Santa Cruz.

Los bolivianos hemos llegado al Censo Nacional de Población y Vivienda con más dudas que certezas. Salvo los voceros del gobierno central y sus sectores afines, hoy reducidos a la fracción arcista, la mayoría desconfía de la transparencia del proceso iniciado a fines de 2022, a tropezones y sólo por la presión ejercida casi exclusivamente por Santa Cruz.

En 2012 dije que era chimán, el censista me miró extrañado y dijo: ¿seguro? Yo le dije que sí, por esas épocas se sentían los efectos del conflicto del TIPNIS y, como muchos paceños, me sentí identificado con los pueblos de tierras bajas, frecuentemente relegados a un segundo plano.

En 2012 dije que era chimán, el censista me miró extrañado y dijo: ¿seguro? Yo le dije que sí, por esas épocas se sentían los efectos del conflicto del TIPNIS y, como muchos paceños, me sentí identificado con los pueblos de tierras bajas, frecuentemente relegados a un segundo plano.

En uno de sus más provocadores y lúcidos ensayos de su libro 21 lecciones para el siglo XXI, el historiador israelí Harari especula sobre uno de los tópicos que considero más importantes de cara al futuro: la educación. El asunto me da vueltas casi todos los días, antes y después de dar las clases en la universidad, y la verdad es que las posibilidades digitales del presente me provocan, de manera simultánea, dos sensaciones antagónicas: escepticismo por un lado, esperanza por el otro.

En uno de sus más provocadores y lúcidos ensayos de su libro 21 lecciones para el siglo XXI, el historiador israelí Harari especula sobre uno de los tópicos que considero más importantes de cara al futuro: la educación. El asunto me da vueltas casi todos los días, antes y después de dar las clases en la universidad, y la verdad es que las posibilidades digitales del presente me provocan, de manera simultánea, dos sensaciones antagónicas: escepticismo por un lado, esperanza por el otro.