El gobernador interino de Santa Cruz, Mario Aguilera, y los empresarios de este departamento, exigieron este martes al Gobierno que suspenda todas las medidas que estarían frenando al aparato productivo, como sin la suspensión de exportaciones de aceite y la intervención a algunos ingenios de arroz.
En un comunicado conjunto, emitido tras una reunión, Aguilera, junto a dirigentes de Cainco, CAO y el sector privado cruceño, afirmaron que “si Santa Cruz se ve afectada, Bolivia sufre un impacto devastador en las finanzas públicas y privadas”.
Señalaron que Santa Cruz representa el 30% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional y el 42% de la recaudación tributaria del país y las exportaciones de la región suman 2.000 millones de dólares por año, por lo que "cualquier medida que pongan en riesgo la inversión privada trae una afectación, no solo a los cruceños, sino a todos los bolivianos".
Para el sector productivo, las medidas adoptadas por el Gobierno “están generando una creciente inflación y un mayor costo directo en los alimentos para nuestra ciudadanía”.
“Estamos frente a medidas equivocadas, erráticas y autoritarias que desestabilizan la cadena productiva base fundamental de la seguridad alimentaria y económica de nuestro país”, dijo Aguilera.
El Gobierno suspendió la exportación de aceite para concentrar la venta del producto en el mercado interno. Además la Fiscalía intervino cinco ingenios de arroz que supuestamente estaban ocultando el grano.