Las exportaciones de quinua boliviana han experimentado un notable incremento del 56% en valor durante el periodo 2014-2024, posicionando a este cereal andino como uno de los principales productos de exportación del país. Estados Unidos se mantiene como el mayor mercado, absorbiendo el 41% de las exportaciones, seguido de Alemania (18%) y China (9%), según un informe del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) basado en datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
En la última década, las exportaciones de quinua alcanzaron cerca de 300 mil toneladas, generando más de 890 millones de dólares. En 2024, el volumen exportado creció un 13% en comparación con el mismo periodo del año anterior, destacando el repunte del comercio exterior boliviano.
El análisis del IBCE resalta años de alto desempeño, como 2017 y 2022, impulsados por precios internacionales favorables y una creciente demanda. En contraste, 2015 y 2020 registraron descensos significativos debido a condiciones climáticas adversas y fluctuaciones en la demanda global.
Factores determinantes
Expertos identifican varios elementos que han influido en el comportamiento de las exportaciones de quinua:
- Condiciones climáticas: Sequías e inundaciones afectaron la producción, limitando la oferta disponible.
- Tendencias globales: El auge de alimentos saludables ha incrementado la demanda de quinua en mercados como Estados Unidos y Europa.
- Políticas comerciales: Los acuerdos internacionales y las regulaciones arancelarias han sido determinantes para la competitividad frente a competidores como Perú.
El enfoque estratégico en mercados clave, como Estados Unidos, Alemania y China, ha sido crucial para fortalecer la presencia de la quinua boliviana en el comercio global. Además de generar divisas, el sector ha impulsado la estabilidad económica de regiones productoras, como el altiplano, contribuyendo también a la generación de empleo.
Desafíos y proyecciones
De acuerdo con expertos, las perspectivas para la quinua boliviana son optimistas. Se espera un crecimiento continuo en las exportaciones, respaldado por la preferencia internacional por alimentos saludables. No obstante, los expertos advierten sobre la necesidad de diversificar mercados para reducir riesgos asociados a la dependencia de destinos como Estados Unidos y Europa, cuyos mercados pueden ser vulnerables a fluctuaciones económicas.
A pesar de los desafíos, como el cambio climático y la volatilidad de los precios, el periodo 2014-2024 ha consolidado la posición de Bolivia como un actor competitivo en el mercado agrícola global.