Con datos de ANSA, AFP y EFE
Los colegios electorales en ocho estados de los Estados Unidos abrieron a las 6 de la mañana (hora local), incluidos los de Connecticut, Nueva Jersey, Nueva York,Nuevo Hampshire y Virginia.
En Indiana y Kentucky, las urnas abrieron a las 6, pero enalgunos casos abrirán a las 7 a.m. En Maine, casi todas lasurnas abren a las 6, pero los municipios con menos de 500 residentes pueden abrir a las 10.
Harris y Trump llegaron al día de las elecciones centrados en siete estados en disputa, en cinco de los cuales, Trump ganó en 2016 antes de que se inclinaran por Biden en 2020: el llamado "muro azul" compuesto por Pensilvania, Michigan y Wisconsin, así como Arizona y Georgia. Nevada y Carolina del Norte, donde demócratas y republicanos ganaron respectivamente en las últimas dos elecciones, también estaban muy disputados.
La pequeña ciudad de Dixville Notch, en New Hampshire, votóa medianoche, siguiendo una tradición de décadas: lavicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trumpempataron con tres votos cada uno.
Después de los últimos comicios con acusaciones cruzadas,los primeros colegios electorales abrieronmarcando el inicio dela larga jornada de votación en Estados Unidos en seis husoshorarios.
Del Atlántico al Pacífico, los ciudadanos americanoselegirán entre Kamala Harris y Donald Trump el próximo ocupantede la Casa Blanca, con encuestas que los muestran cabeza acabeza en 7 estados clave (Pensilvania, Nevada, Wisconsin,Georgia, Carolina del Norte, Michigan, Arizona).
Más de 80 millones de estadounidenses ya han votado poradelantado, ya sea por correo o en persona, mientras queaproximadamente la otra mitad tendrá hasta las 20:00 horas.
Es imposible saber si harán falta horas o días de recuentopara decidir entre la vicepresidenta demócrata, que aspira a serla primera mujer al frente de Estados Unidos, y el expresidenterepublicano, de 78 años, que aspira a regresar a la Casa Blanca.
Las primeras urnas cerrarán a las 0 GMT en seis estados,entre ellos el clave Georgia (que reparte 16 grandes electores),así como Indiana, Kentucky, Carolina del Sur, Vermont yVirginia. La última votación será en Alaska, donde las urnascierran a las 6 de la mañana GMT.
La campaña electoral ha sido larga y reñida: Harris la cerró107 días después de su investidura en Pensilvania, el estadoindeciso considerado decisivo con sus 19 grandes electores,mientras que Trump habló en Michigan, donde cerró sus trescampañas presidenciales.
Alerta máxima de seguridad con altas vallas metálicas ybarricadas en torno a la Casa Blanca, el Capitolio y laresidencia de Kamala Karris: medidas que recuerdan a lasadoptadas tras el infame ataque al Congreso el 6 de enero porseguidores de Donald Trump.
En juego está no solo la elección del nuevo presidente, sinotambién la renovación del Congreso (la totalidad de la Cámara,un tercio del Senado), que será decisiva para reforzar o limitary controlar los poderes del comandante en jefe.
Harris, de 60 años, sería la primera mujer, la primera mujer negra y la primera persona de ascendencia surasiática en ocupar el máximo cargo. También sería la primera vicepresidenta en ejercicio en ganar la Casa Blanca en 32 años.
Su victoria coronaría una campaña vertiginosa como ninguna otra en la historia estadounidense. Harris ascendió a la cima de la candidatura demócrata hace menos de cuatro meses, después de que Biden, enfrentando una enorme presión de su partido tras un desastroso desempeño en un debate, pusiera fin a su candidatura a la reelección.
Trump, de 78 años, sería el presidente de mayor edad jamás elegido. También sería el primer presidente derrotado en 132 años en ganar otro mandato en la Casa Blanca, y la primera persona condenada por un delito grave en ocupar el Despacho Oval.
Tras dejar Washington y ser abandonado por algunos de sus aliados después del 6 de enero, Trump derrotó a rivales más jóvenes en las primarias republicanas y consolidó el apoyo de aliados de larga data y duros críticos dentro de su partido. Sobrevivió por milímetros a un intento de asesinato en un mitin en julio. Agentes del Servicio Secreto frustraron un segundo intento en septiembre.
Una victoria de Trump confirmaría que un número suficiente de votantes no hizo caso a las advertencias de muchos de los exasesores de Trump o que, en cambio, dio prioridad a las preocupaciones sobre la economía o la frontera entre Estados Unidos y México por parte del gobierno de Biden y Harris.