Ramiro Blacut Rodríguez, leyenda del fútbol boliviano, dejó este mundo ayer a los 80 años, tras una vida muy ligada al deporte, sembrando un legado a nivel nacional e internacional en el balompié.
Nacido en La Paz (3 de enero de 1944), Blacut se dio a conocer en Bolívar (1959-1962, 1966-1971), luego fue parte de la gira europea con Always Ready (1961). Dio el salto a nivel internacional en Ferrocarril Oeste de Argentina (1963-1965), fue el primer futbolista en jugar en Bayern Múnich de Alemania (1965) y Melgar de Arequipa (1972-1973).
Regresó a Bolivia para cerrar su carrera en The Strongest (1974) y Universitario de La Paz (1975).
El cenit de su carrera lo alcanzó con la selección nacional y el recordado título del Sudamericano 1963 en Bolivia. Este logro le dio estatus internacional, siendo que en 1965 se fue a estudiar ingeniería a Alemania y reclutado por Bayern Múnich, donde compartió vestuario con las leyendas como Franz Beckenbauer y Gerd Müller.
Como entrenador, destacó en varios clubes y también llevó el legado nacional en alto ea Ecuador: dirigió con mucho éxito a Deportivo Aucas, El Nacional y Deportivo Cuenca.
En 2013 fue condecorado con la Orden al Mérito de Conmebol por su dilatada trayectoria deportiva en el país.
“Ha muerto un grande del fútbol nacional, una figura señera y ejemplar, inolvidable como ejemplo de lo que puede lograrse con tesón, responsabilidad y objetivos claros”, comentó el expresidente e historiador Carlos Mesa, quien publicó una biografía de Blacut en su página Historia del Fútbol Boliviano.
HOMENAJES PÓSTUMOS
Distintas entidades del fútbol nacional rindieron un sentido homenaje a Blacut, como una muestra de agradecimiento a su trayectoria.
La Federación Boliviana de Fútbol (FBF), los clubes The Strongest, Bolívar, Always Ready, Wilstermann, entre otros, publicaron avisos en sus redes sociales recordando al destacado futbolista y entrenador.
Ayer se cumplió un minuto de silencio en la previa de los cotejos oficiales de fútbol.
Blacut y la anécdota del título de 1963
“Creo que la más grande lección que podemos sacar del campeonato de 1963 es que el logro fue porque nos unimos todos los bolivianos; no hubo ninguna distinción de edades, tampoco regionalismos. Esa lección es la que deben aprender las nuevas generaciones porque, de lo contrario, con un país dividido, nada se puede conseguir”, dijo Ramiro Blacut Rodríguez a Los Tiempos, en entrevista publicada el 1 de abril de 2013, un día después de la celebración del 50 aniversario de la gesta del título del Sudamericano de 1963.
Y fue precisamente en el estadio Félix Capriles donde los “Héroes de 1963” se pusieron los buzos y medio siglo después volvieron a celebrar lo que obtuvieron, con el mismo cariño y reconocimiento del público que aplaudió a los ídolos.
Toda esta historia se escribió y quedará impresa en páginas de oro para siempre.