Este miércoles, el teatro Achá será escenario de un evento musical de gran relevancia. La reconocida pianista cochabambina Marianela Aparicio, con una destacada trayectoria internacional, presentará su más reciente álbum, titulado Ánima: composiciones y arreglos de música boliviana, producido por el sello argentino Virtuoso Records.
Este concierto, que comenzará a las 19:30, reúne música boliviana, especialmente de la región oriental, a través de los arreglos y composiciones de Aparicio. En el programa se incluyen piezas tradicionales como “Niña camba”, “Sombrero de sao”, “Alma cruceña” y “Jumechi”, que han sido reinterpretadas con un enfoque pianístico universal, conservando la esencia del folklore boliviano mientras se presentan con la sofisticación del piano clásico.
Aparicio compartirá el escenario con el talentoso violinista Arpad Debreczni, quien se unirá a ella para interpretar dos obras del compositor cochabambino Huáscar Bolívar Vallejo: “Tierra salada” y “El cementerio de los elefantes”. Estas composiciones han recibido elogios a nivel nacional e internacional, destacándose recientemente con la mención de honor en el premio Eduardo Abaroa en la categoría de arreglo musical.
Ánima
El álbum está compuesto por seis obras, de las cuales cuatro forman parte del proyecto “Piano con aire oriental”, una iniciativa de Aparicio que busca adaptar y reimaginar piezas emblemáticas del oriente boliviano a través de un lenguaje pianístico de alcance universal. Este proyecto marca un punto de inflexión en la carrera de Aparicio, quien ha incursionado con éxito en el mundo de la composición y los arreglos, fusionando elementos de la música tradicional con la técnica y la expresión del piano clásico.
El concepto de Ánima se refiere al alma, la esencia más íntima y auténtica de una persona. Según Aparicio, el álbum representa una figura etérea y trascendente, llena de vida y colores vibrantes, que irradia energía y refleja la profunda carga emocional y sentimental que ella ha depositado en cada una de las piezas.
Además del concierto, se realizará el lanzamiento oficial de los dos tomos que conforman Ánima. Uno contiene los arreglos de Aparicio, mientras que el otro las obras de Bolívar. Ambos tomos forman parte de la colección de Compositores Bolivianos, patrocinada por Jan y Maria Teresa Rivera de Stahlie, y estarán disponibles para músicos y pianistas bolivianos, así como para el público en general. Estas obras ya han sido presentadas en la gira europea de Aparicio, que incluyó países como Polonia, Alemania y España.
Críticas y apreciaciones internacionales
El trabajo de la pianista ha sido aclamado por la crítica internacional. Pablo Aguirre, un renombrado compositor argentino, comentó desde Buenos Aires que Marianela “selecciona temas que son originalmente muy sencillos en cuanto a armonía y estructura, y ella podría haber elegido muchos caminos a la hora de hacer ‘su’ versión. En este caso, utiliza una armonía que no pretende ser contemporánea ni jazzística ni nada de eso: conserva mucho de sus ejes originales y le suma un pianismo virtuoso lleno de herramientas del repertorio pianístico académico. El respeto profundo al folklore que conoce en profundidad le da a este trabajo un toque muy personal”.
Sobre los artistas
Aparicio se ha destacado por una carrera versátil que la ha llevado a escenarios en más de una docena de países, incluyendo Polonia, Francia, Italia, y México. Ha ofrecido recitales como solista y ha colaborado con importantes orquestas, como la Orquesta Filarmónica Kozalinska de Polonia y la Orquesta Sinfónica Nacional Boliviana. Además, Aparicio es la directora artística del Festival Internacional de Piano Encuentros, cuya reciente edición en Santa Cruz fue un rotundo éxito.
Arpad Debreczni, violinista cochabambino que acompañará a Aparicio, ha tenido una formación destacada en el Instituto Eduardo Laredo y en la Academia Latinoamericana Superior de Violín en Concepción, Chile, gracias a una beca de la Fundación Arnoldo Schwimmer. Ha sido concertino de varias orquestas, entre ellas la Orquesta Filarmónica de Cochabamba, y es ganador del Premio Nacional Eduardo Abaroa en 2015. Actualmente, dirige un taller de cuerdas en Sucre y es profesor de violín en el Instituto Eduardo Laredo en Cochabamba.