Omar Ortuño, pescador de la comunidad de Puerto Villarroel, y Tomas Suárez, pescador de Bella Vista, se reunieron en esta última localidad para compartir sus vivencias, intercambiar conocimientos y reflexionar sobre las amenazas actuales que enfrentan en sus respectivas regiones.
El importante intercambio de experiencias entre los dos pescadores bolivianos que desde hace más de una década han estado trabajando en la protección del delfín de río boliviano, se produjo recientemente con el impulso de Faunagua.
La continuidad en el cultivo y la transmisión de conocimientos entre los pescadores es primordial para entender a ciencia cierta el estado de la biodiversidad en las cuencas Mamoré e Iténez, y en particular, la situación del delfín de río boliviano, más conocido como bufeo.
Esta información resulta trascendental para el diseño e implementación de estrategias de conservación más efectivas, ya que los pescadores, con el paso de los años de interacción con su entorno, han cosechado un valioso conocimiento sobre los ecosistemas acuáticos.
Durante este encuentro, uno de los temas que más inquietó al par de pescadores fue la enérgica depreciación de las poblaciones de peces en la región, un inconveniente que afecta claramente tanto a los pescadores como a la fauna acuática.
Ortuño y Suárez convinieron en que una de las principales orígenes de este fenómeno es la invasión del paiche, un pez de gran tamaño que ha irrumpido los ecosistemas acuáticos de la zona. Así también, los pescadores reflexionaron sobre el impacto que esta invasión podría tener sobre el delfín de río, ya que el paiche también compite por los mismos recursos alimentarios que el bufeo.
La colaboración entre los pescadores de distintas comunidades se ha vuelto esencial para identificar y abordar estas amenazas de manera efectiva.
