Al menos 40 especies de aves retornaron a la laguna Alalay luego del dragado, pero aún resta ejecutar tres trabajos complementarios para concretar la recuperación integral de este espejo de agua.
Entre las obras pendientes se encuentran la construcción de una “zanja de coronamiento” para evitar el ingreso de aguas servidas, la forestación y las gestiones para la recarga permanente de recursos hídricos. La Alcaldía de Cochabamba prevé que pronto se inicie con la “zanja.
En una inspección, Los Tiempos evidenció la existencia de patos, flamencos, playeros, garzas, gaviotas, entre otras especies que sobrevuelan o se pasean en la laguna.
La Universidad Mayor de San Simón (UMSS) hizo un estudio en pasados años donde detalla la existencia de 180 especies en el entorno del embalse. El informe señala que aves acuáticas y terrestres llegan en diferentes épocas del año para quedarse por semanas o meses, incluso, algunos patos lo transforman en su hábitat.
Para el técnico de Recursos Naturales de la Alcaldía, Andrei Mamani, es necesario hacer una actualización, debido a que la laguna y su ecosistema, después del dragado y del llenado de nuevas aguas, es otra. No se descarta que haya más especies por el cambio de las condiciones.
Por otro lado, los mayores depredadores de las aves son los perros callejeros. Mamani contó que suelen llegar a los nidos para devorar los huevos y a los polluelos. Es por esta razón que se emplazaron puntos de anidación en pequeñas islas, en una zona de aguas profundas.
En un recorrido en bote, se constató que ya no hay malos olores, el agua es clara y el paisaje cambió. En gestiones pasadas, en época de estiaje, el vaso de agua estaba seco, pero ahora embellece el paisaje de Cochabamba.
Según el director de Medio Ambiente de la Alcaldía, Elvis Gutiérrez, el espejo de agua acumula 3 millones de metros cúbicos, aunque por las altas temperaturas se evaporaron 50 centímetros. Para conservarlo en este estado se requiere el ingreso de aguas limpias dos veces al año.
Gutiérrez dijo que aún se gestiona con Misicuni para que no sólo ingrese y se llene, sino se pueda oxigenar y pueda ser el canal para que, a través de la “serpiente negra”, el líquido llegue a La Maica, al sur de la ciudad, para riego.
“Esta medida no sólo ayudará a que exista una mejor oxigenación, sino también a los regantes de La Maica. Después de mucho tiempo se podrá soltar agua de ese canal. La laguna está en su mejor estado, al menos en los últimos 30 años”, explicó.
Otro factor importante es el control de las algas. Es por esta razón que se realizan constantes limpiezas para evitar la proliferación.
Mamani dijo que para exista un control natural se tendría que contar con hipopótamos o capibaras, pero sería contraproducente porque demandaría otros cuidados más para el personal, visitantes y otros factores.
Más obras
La Alcaldía de Cochabamba ya cuenta con fondos para ejecutar la segunda fase para recuperar la laguna Alalay. El financiamiento permitirá construir una “zanja de coronamiento” que impedirá el ingreso de aguas residuales al vaso de agua.
Aún se realizan los trámites administrativos en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) para concretar el desembolso de 15 millones bolivianos. Una vez concretado el proceso, empezarán los trabajos.
El dragado demandó más de 30 millones de bolivianos en la primera fase y logró inyectar aguas de la represa de La Angostura, según antecedentes del tema.