El máximo tribunal de justicia de Chile condenó la noche del viernes a cuatro militares en retiro a 20 años de prisión por el emblemático Caso Quemados, ocurrido en 1986, durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Los hechos se produjeron el 2 de julio de 1986, en Santiago, durante una jornada de protesta nacional, cuando una patrulla militar arrestó, golpeó, roció con combustible y quemó a los jóvenes Carmen Gloria Quintana y Rodrigo Rojas de Negri.
Mientras Quintana, una estudiante universitaria entonces de 18 años sobrevivió a las graves quemaduras que sufrió, Rojas, un fotógrafo de 19 años, falleció cuatro días después.
La Corte Suprema puso fin al proceso y condenó a 20 años de cárcel a los oficiales de Ejército en retiro Pedro Fernández Dittus, Julio Castañer González, Iván Figueroa Canobra, Nelson Medina Gálvez por los delitos de homicidio calificado de Rojas de Negri y de homicidio calificado, en grado de frustrado, de Carmen Gloria Quintana.
También hubo condenas menores para cuatro exconscriptos, acusados de ser cómplices y otros dos exmilitares como encubridores.
El Caso Quemados es uno de los más emblemáticos en los últimos años de la dictadura de Pinochet (1973-1990), que dejó más de 3.200 víctimas, entre asesinados y desaparecidos.
Este fallo pone "término a un largo proceso, muy tortuoso en su desarrollo, donde había que controvertir una tesis oficial asentada por el mismísimo dictador, en cuanto a que los jóvenes se quemaron a sí mismos porque portaban en sus ropas las bombas incendiarias", destacó el abogado de Carmen Gloria Quintana, Nelson Caucoto, citado por la radio Cooperativa.