El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo campaña este sábado en favor del candidato de la izquierda a alcalde de São Paulo, Guilherme Boulos, a una semana de una elección municipal que mide la fuerza del mandatario frente al bolsonarismo.
Lula destacó el "compromiso" de Boulos para mejorar la educación y la sanidad públicas y trató de alejar la imagen radical del candidato y actual diputado, quien lideró en el pasado un movimiento en favor del derecho a la vivienda y protagonizó ocupaciones de terrenos abandonados.
"Vamos a conversar con las personas que piensan que Boulos va a invadir sus casas", afirmó, durante una grabación conjunta publicada en redes sociales, después de que fueran cancelados dos mítines en la calle debido a la lluvia.Lula criticó, además, al actual alcalde y candidato a la reelección, Ricardo Nunes, por no podar los árboles antes de que una tormenta provocara hace una semana un apagón masivo en la ciudad que dejó sin luz a 3,1 millones de clientes.
El presidente aprovechó el tema del momento para presentar los programas lanzados por el Gobierno federal para ayudar a la población afectada.
Nunes tiene el respaldo del exmandatario ultraderechista Jair Bolsonaro (2019-2022) y las últimas encuestas le dan una ventaja de casi 20 puntos porcentuales sobre Boulos en una ciudad que Lula ganó en las elecciones presidenciales de 2022.
La izquierda se juega el próximo domingo su relevancia como fuerza municipal en Brasil, después de que muchos de sus candidatos fueran eliminados en el primer turno de los comicios, celebrados el 6 de octubre.
El mandatario no participó activamente en la campaña antes del primer turno para no provocar tensiones con otros partidos de centroderecha que forman parte del Gobierno y cuyo apoyo necesita en el Congreso para aprobar leyes.
Sin embargo, la amplia desventaja de Boulos en la que es la mayor ciudad del país y de Suramérica, además de ser el lugar donde arrancó la carrera política de Lula, ha forzado al presidente a pisar la calle.
En el primer turno, el Partido Liberal de Bolsonaro logró más del doble de alcaldes que el Partido de los Trabajadores de Lula