Actualidad
Un espacio que perdura y atrae a decenas de devotos es el de las “almas olvidadas o milagrosas”
Desde el municipio de Cochabamba señalaron que la Sala Constitucional Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca
Los pobladores del Distrito 5 del municipio de Tiquipaya, ante el inicio de la temporada de lluvias
Las Seis Federaciones del Trópico y las organizaciones sociales evistas masifican los 18 puntos de bloqueo
El modelo extractivista en Bolivia ha profundizado la crisis ecológica y acentuado las desigualdades socioeconómicas en las comunidades más vulnerables
En Cochabamba siete abogados se disputan una titularidad y una suplencia en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y en el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP)
Opinión

Hace 200 años y cuatro días tuvo lugar la batalla que definió la liberación de las colonias españolas y cuyas características e impacto tendrían que inspirar en los bolivianos el espíritu de la celebración que merece el bicentenario de nuestra independencia.

Puntos de Vista

Cuando ya se ha transitado bastante por la vida, y los problemas políticos domésticos producen dolor de cabeza y vergüenza, recordar algunas cosas que se van borrando con el tiempo es muy saludable. En mi actividad diplomática conocí a muchos personajes importantes, que, desde García Márquez a Mandela, sería imposible enumerar. Pero esta mañana he recordado a dos figuras que no se asemejan en nada, pero que me impresionaron: Francisco Franco y don Juan Carlos de Borbón.

Cuando ya se ha transitado bastante por la vida, y los problemas políticos domésticos producen dolor de cabeza y vergüenza, recordar algunas cosas que se van borrando con el tiempo es muy saludable. En mi actividad diplomática conocí a muchos personajes importantes, que, desde García Márquez a Mandela, sería imposible enumerar. Pero esta mañana he recordado a dos figuras que no se asemejan en nada, pero que me impresionaron: Francisco Franco y don Juan Carlos de Borbón.

Una de las paradojas fundamentales de la representación democrática radica en la cuestión de la representatividad genuina. Aunque los representantes son elegidos para actuar en nombre del pueblo, ¿realmente reflejan las opiniones, intereses y diversidad del electorado? En la práctica, la representación puede está distorsionada por influencias económicas, desigualdades sociales y sistemas electorales que favorecen a ciertos grupos sobre otros.

Una de las paradojas fundamentales de la representación democrática radica en la cuestión de la representatividad genuina. Aunque los representantes son elegidos para actuar en nombre del pueblo, ¿realmente reflejan las opiniones, intereses y diversidad del electorado? En la práctica, la representación puede está distorsionada por influencias económicas, desigualdades sociales y sistemas electorales que favorecen a ciertos grupos sobre otros.

El antropólogo Claudio Lomnitz reunió siete conferencias dictadas en El Colegio Nacional de México, en un brillante libro titulado Para una teología política del crimen organizado, que ofrece varios conceptos analíticos que pueden ser de utilidad para nuevas aproximaciones a la interacción entre narcotráfico, Estado y sociedad, también aquí en Bolivia.

El antropólogo Claudio Lomnitz reunió siete conferencias dictadas en El Colegio Nacional de México, en un brillante libro titulado Para una teología política del crimen organizado, que ofrece varios conceptos analíticos que pueden ser de utilidad para nuevas aproximaciones a la interacción entre narcotráfico, Estado y sociedad, también aquí en Bolivia.

Uno de los desafíos mayores de la sociología y las ciencias políticas se presentó cuando ambas se dieron a la tarea de definir qué era el fascismo. La imposibilidad de darle una definición estriba en el hecho de que el fascismo se amalgama con la tradición política, la cultura e incluso la idiosincrasia de la sociedad donde se pretende imponerlo, de manera que el fascismo italiano de Mussolini no era exactamente igual al español de Francisco Franco, al alemán de Hitler o al japonés de Hirohito.

Uno de los desafíos mayores de la sociología y las ciencias políticas se presentó cuando ambas se dieron a la tarea de definir qué era el fascismo. La imposibilidad de darle una definición estriba en el hecho de que el fascismo se amalgama con la tradición política, la cultura e incluso la idiosincrasia de la sociedad donde se pretende imponerlo, de manera que el fascismo italiano de Mussolini no era exactamente igual al español de Francisco Franco, al alemán de Hitler o al japonés de Hirohito.