¿Conoces todos los secretos para una rutina de limpieza facial infalible? ¿Sabes qué productos son los más adecuados? ¿Y los imprescindibles? ¿Es mejor hacerla de día o de noche?
Cuidar la piel del rostro requiere de disciplina y continuidad para ver resultados óptimos.
Además de una limpieza ideal, es recomendable el uso de protector solar todos los días debido a que una exposición cotidiana al sol puede provocar manchas y arrugas.
Lo ideal es mantener una rutina de limpieza en casa, mientras que de vez en cuando es recomendable ponerse en manos de un profesional para tratar imperfecciones, según detalla el portal de Tahe Cosmetics.
¿Cómo empezar?
Una cosa está clara: ninguna piel puede estar perfecta si no se limpia a conciencia, por lo que es necesario seguir un protocolo de higiene y tener a mano algunos productos imprescindibles.
Paso 1: Lavado sencillo
¿Estás maquillada? Ya sabes el primer paso: agarra tu agua micelar y elimina todos los restos de maquillaje, haciendo especial hincapié en ojos y labios. Después, lávate la cara con agua tibia y un jabón neutro. El objetivo es retirar las impurezas acumuladas en el rostro, así como la suciedad y grasa que pueda retener tu piel.
Ahora, nuevamente, pasa alrededor del rostro y cuello un disco de algodón mojado en agua micelar.
Paso 2: Aplica un exfoliante
El segundo paso para la rutina de limpieza de cutis casera es aplicar un exfoliante facial. ¿Cómo? Muy fácil: con el cutis ligeramente húmedo, aplica el exfoliante en pequeñas cantidades incidiendo sobre todo en nariz y mejillas. Empieza por la frente y desciende poco a poco por el contorno de la cara con movimientos circulares.
Y no olvides los labios. En este paso eliminarás pieles muertas, restos de suciedad… La frecuencia dependerá de tu tipo de piel, pero puedes hacerlo dos veces por semana.
Paso 3: Abre los poros
Ahora toca abrir los poros. Para ello, basta con realizar un baño de vapor. Tan sólo pon agua a hervir y, cuando esté lista, acerca tu rostro unos 30 centímetros al recipiente que uses. Un consejo: cubre tu cabeza con una toalla y aguanta en esta posición 10 minutos.
Paso 4: Aplica un tónico
El siguiente paso para una limpieza facial en casa es aplicar un tónico. Utiliza un algodón o tus dedos siempre que estén limpios. El tónico tiene una doble función: por un lado, elimina cualquier impureza que no haya podido ser eliminada con los pasos anteriores y, por el otro, consigue cerrar los poros completamente. Esto último es fundamental para conseguir que la piel quede limpia y resguardada de cualquier agente contaminante externo.
Paso 5: No olvides la hidratación
Para terminar la limpieza de rostro casera el último paso es hidratar la piel. ¡Importantísimo! Posiblemente, después de todo el proceso, nuestra cara estará dañada y enrojecida. Por eso, es recomendable nutrir profundamente para regenerar la salud del cutis. Y, para ello, nada mejor que una buena mascarilla hidratante. Recuerda, después de aplicarla, realizar una nueva limpieza facial sencilla.
(Extra) Paso 6: Sérum y cremas para un extra de hidratación
Este paso no es obligatorio pero sí recomendable. El sérum es uno de los grandes olvidados si hablamos de una adecuada limpieza para el rostro. Lo recomendamos especialmente porque con él llegamos a las capas más profundas del cutis aportando un plus de vitalidad y luminosidad. También puedes añadir una crema hidratante para completar tu rutina de limpieza facial profunda.