El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, reconoció hoy que Ucrania atraviesa circunstancias complicadas tanto en el campo de batalla como desde el punto de vista de la economía y de las relaciones con algunos de sus socios, pero aseguró que la situación está "plenamente controlada".
"Podemos hablar largo y tendido sobre lo que está ocurriendo en el campo de batalla y con la economía, sobre cuál es la situación con nuestros socios, cómo las sociedades de los países vecinos nos apoyan o no, qué ocurre en las fronteras de Ucrania" , dijo Zelenski en una rueda de prensa conjunta con el primer ministro búlgaro, Nikolai Denkov.
El presidente añadió que "es difícil describir en una palabra" el momento actual, y recurrió para hacerlo a la frase que utilizan sus militares "cuando les pregunto qué ocurre en el campo de batalla".
"La situación es difícil, pero plenamente controlada", dijo Zelenski.
Ucrania sufre en el frente un importante déficit de artillería, munición y defensa antiaérea motivado por los retrasos de sus aliados a la hora de enviar ayuda militar a Kiev.
Rusia aprovecha esta circunstancia para aumentar su presión sobre las defensas ucranianas y está logrando avances en el frente del este.
Además, los agricultores polacos están bloqueando puntos fronterizos con Ucrania en protesta por la supuesta competencia desleal que representan los productos del campo ucranianos.
Según el Gobierno ucraniano los manifestantes polacos han tirado a la calzada en las últimas semanas unas 160 toneladas de grano ucraniano durante esas protestas.
En su reunión de hoy en Kiev, Zelenski y el primer ministro búlgaro acordaron seguir trabajando para "acelerar el desarrollo de la logística y de la infraestructura en la región".
Zelenski agradeció a Denkov la cooperación de Bulgaria para que Ucrania haya podido reanudar sus exportaciones por el mar Negro.
Los incendios forestales que asolan Bolivia desde hace más de tres meses han arrasado ya 4 millones de hectáreas, devastando miles de árboles y acabando con innumerables vidas animales. El impacto humano es igual de aterrador: familias enteras han tenido que ser evacuadas, viviendas se han convertido en cenizas, y niños y jóvenes han dejado de ir a la escuela por seguridad.
El 29/08/1985 Víctor Paz Estenssoro promulgó el DS 21060 apoyado en el “Pacto por la democracia” suscrito por el MNR y la ADN. Resumió sus motivos afirmando que “Bolivia se nos muere”. A esas alturas el capitalismo de estado consolidado en 1952 había colapsado y la economía agonizaba en el contexto de la hiperinflación.
El 29/08/1985 Víctor Paz Estenssoro promulgó el DS 21060 apoyado en el “Pacto por la democracia” suscrito por el MNR y la ADN. Resumió sus motivos afirmando que “Bolivia se nos muere”. A esas alturas el capitalismo de estado consolidado en 1952 había colapsado y la economía agonizaba en el contexto de la hiperinflación.
Una noche antes de que Eduardo muriera, lo soñé en una silla de ruedas, muy delgado y con un gorro que no sé si alguna vez usó. Me acercaba y le ponía mi mano en su frente y le decía que iba a mejorar. Él respondía que ya no... Dado que no he logrado interpretar ese sueño de otra forma que no fuera una despedida, ocupo mi columna -como lo han hecho otros con el mismo afecto- para decirle a-Dios.
Una noche antes de que Eduardo muriera, lo soñé en una silla de ruedas, muy delgado y con un gorro que no sé si alguna vez usó. Me acercaba y le ponía mi mano en su frente y le decía que iba a mejorar. Él respondía que ya no... Dado que no he logrado interpretar ese sueño de otra forma que no fuera una despedida, ocupo mi columna -como lo han hecho otros con el mismo afecto- para decirle a-Dios.
Eduardo Pérez Iribarne (EPI) fue un sacerdote boliviano. Imbuido de la inculturación jesuítica, buscó parecerse —además de entender— a la sociedad en la que eligió vivir y morir. Por ejemplo, él se forzó a abandonar el acento español. En uno de sus colmos, a veces usaba una “erre” artificial, pero por lo demás adoptó el habla paceña de clase media. A la vez, le gustaba ejercitarse en frases de la gente, como la de “habló ‘para mí’”.
Eduardo Pérez Iribarne (EPI) fue un sacerdote boliviano. Imbuido de la inculturación jesuítica, buscó parecerse —además de entender— a la sociedad en la que eligió vivir y morir. Por ejemplo, él se forzó a abandonar el acento español. En uno de sus colmos, a veces usaba una “erre” artificial, pero por lo demás adoptó el habla paceña de clase media. A la vez, le gustaba ejercitarse en frases de la gente, como la de “habló ‘para mí’”.
El país está desequilibrado y con tendencia a quebrarse nuevamente. Viene sucediendo, con asiduidad, que el momento extraordinario de crisis se convierte en lo cotidiano, produciendo una costumbre perturbadora de nuestras posibilidades como país. El negacionismo de una crisis económica con transferencias de responsabilidades impide alcanzar a comprender que, la exposición pública, siempre subjetiva de culpas, no soluciona mecánicamente los problemas.
El país está desequilibrado y con tendencia a quebrarse nuevamente. Viene sucediendo, con asiduidad, que el momento extraordinario de crisis se convierte en lo cotidiano, produciendo una costumbre perturbadora de nuestras posibilidades como país. El negacionismo de una crisis económica con transferencias de responsabilidades impide alcanzar a comprender que, la exposición pública, siempre subjetiva de culpas, no soluciona mecánicamente los problemas.