En el cálido abrazo del Día de la Madre, celebramos no sólo el amor incondicional que estas figuras maternas representan, sino también los lazos que trascienden lo familiar para entrelazarse con pasiones compartidas. Este día, queremos honrar a cinco parejas de madres e hijos que, inspirados por el ejemplo y la dedicación materna, han seguido los mismos caminos profesionales, llevando consigo amor, compromiso y arte.
Betty Veizaga y Quilla Zurita, acompañadas por la música folklórica
Para Betty Veizaga y Quilla Zurita, la música no soló es una profesión, sino también un vínculo sagrado que comparten como madre e hija. Desde temprana edad, Quilla admiraba la pasión y dedicación de su madre por la música folklórica boliviana, lo que la inspiró a seguir sus pasos. Hoy, juntas, llevan en alto el estandarte de la música nacional en escenarios tanto locales como internacionales. Para Betty, ver a su hija desplegar su talento es una fuente inagotable de orgullo y alegría, mientras que Quilla encuentra en su madre no sólo una mentora, sino también un ejemplo de amor por la cultura y la tradición.
Chichina y Paola Schütt en el mundo del diseño y la alta costura
En el atelier de Chichina y Paola Schütt, el arte se entrelaza con la familia y la tradición. Desde que Paola era apenas una niña, observaba con admiración el trabajo de su madre en el diseño y la alta costura. Ahora, como socia y colaboradora de la firma familiar, continúa el legado de elegancia y creatividad que su madre inició hace 40 años. Más que una maestra en el arte del diseño, Chichina es un ejemplo de fuerza, humildad y amor, valores que se reflejan tanto en sus creaciones como en su vida cotidiana.
Erika Andia y Clara Muñoz, una vida en el arte
Desde antes de nacer, Clara Muñoz ya estaba destinada a seguir los pasos artísticos de su madre, Erika Andia. Criada en un ambiente saturado de arte y creatividad, Clara encontró su pasión en la música y el teatro, inspirada por el ejemplo y el amor materno. Juntas, madre e hija han compartido no sólo momentos en el escenario, sino también el sueño de crear espacios para el arte y la expresión en su comunidad.
Erika ha sido una fuente de inspiración y apoyo constante para Clara, creando espacios para que los niños se involucren en el teatro y el arte. “Es muy emocionante verla realizarse en el arte que ha elegido”, dice Erika. Su influencia ha sido fundamental en su formación artística así como también en su desarrollo como una mujer feliz y realizada.
Gloria Limpias junto a Mariana y Tatiana: empoderando a través de la belleza
Para Gloria Limpias y sus hijas Mariana y Tatiana, el mundo de los certámenes de belleza no es sólo una industria, sino también una plataforma para empoderar a las mujeres bolivianas. Inspiradas por el compromiso y la visión de su madre, Mariana y Tatiana se han unido a ella en la empresa familiar, Promociones Gloria, donde trabajan juntas para promover la belleza y el empoderamiento femenino. El mayor desafío —según Tatiana— es estar a la altura del legado de su madre, pero también es una fuente de motivación para innovar y expandir el impacto positivo de su empresa.
Estela Rivera y Juan Ernesto Saavedra, vocación musical
Estela Rivera y su hijo, Juan Ernesto Saavedra, comparten una profunda conexión a través de la música. “Creo que Juan Ernesto es un gran músico y mucho mejor que yo”, dice Estela con orgullo. Aunque no se considera su mentora, Estela ha sido una influencia significativa en la vida de Juan Ernesto, inculcándole el amor por diversas formas de arte desde su niñez.
Juan Ernesto reconoce la influencia de su madre en su carrera musical. “Admiro su dedicación incansable hacia su trabajo y cómo siempre encuentra soluciones creativas a los desafíos”, comenta. Estela ha fomentado en él una pasión por la creatividad y el arte en general, desde la literatura hasta el cine. Esta influencia ha permitido a Juan Ernesto desarrollar un estilo propio y original en sus composiciones y arreglos musicales.