La sesión de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) que daría inicio a la legislatura 2024-2025 y donde el presidente Luis Arce debía brindar su informe de cuatro años de gestión fue suspendida esta mañana luego que legisladores evistas lanzaron tomates, flores y agua al vicepresidente, David Choquehuanca.
La gresca ocurrió cuando Choquehunca intentaba instalar la sesión, la seguridad del vicepresidente trato de protegerlo y lo cubrió con una prensa de vestir.
La diputada evista María Alanoca, Héctor Arce y otros legisladores evistas protagonizaron los incidentes. Tras lo sucedido los diputados y senadores abandonaron el hemiciclo.
Después de 20 meses de iniciado, el proceso para la realización de las elecciones judiciales parece encaminarse a su fin en una modalidad ajena a lo prescrito en la Constitución Política del Estado (CPE).
Esa distorsión, la larga lista de peripecias que ha vencido este trámite y, sobre todo, la deteriorada confianza que inspira en los bolivianos la administración de justicia nacional, plantean la necesidad de un serio cuestionamiento al sistema judicial vigente en el país.
Un fantasma recorre Bolivia. Es el fantasma de la muerte de la democracia. Porque, si el MAS gana las elecciones de 2025, significará la cancelación de la democracia. No nos hagamos ilusiones. Si ello ocurre, las “elecciones” de 2030 serán como en Venezuela, Cuba o Nicaragua: con candidato, partido y lista únicos.
Un fantasma recorre Bolivia. Es el fantasma de la muerte de la democracia. Porque, si el MAS gana las elecciones de 2025, significará la cancelación de la democracia. No nos hagamos ilusiones. Si ello ocurre, las “elecciones” de 2030 serán como en Venezuela, Cuba o Nicaragua: con candidato, partido y lista únicos.
FÁTIMA ZAMBRANA ALMARAZ
Hace aproximadamente 10 años, la economía boliviana comenzó a experimentar una desaceleración en su crecimiento, lo que no significaba una contracción económica absoluta per se, sino más bien que indicaba un crecimiento más lento en comparación a años anteriores. A partir de entonces, los economistas advertían las debilidades del modelo económico vigente y los problemas de fondo.
Hace aproximadamente 10 años, la economía boliviana comenzó a experimentar una desaceleración en su crecimiento, lo que no significaba una contracción económica absoluta per se, sino más bien que indicaba un crecimiento más lento en comparación a años anteriores. A partir de entonces, los economistas advertían las debilidades del modelo económico vigente y los problemas de fondo.
¿Qué hacen los habitantes de un país cuando las pandillas mafiosas toman el control del 85% del territorio? ¿Cuándo éstas asesinan por robar un celular o porque quieren apropiarse de la casa que les gusta? ¿O, cuando una empleada doméstica vuelve a su casa y tiene que pagar a las maras para entrar su barrio, caso contrario la matan o violan?¿O, cuando los maleantes ven un auto caro y secuestran al dueño?
¿Qué hacen los habitantes de un país cuando las pandillas mafiosas toman el control del 85% del territorio? ¿Cuándo éstas asesinan por robar un celular o porque quieren apropiarse de la casa que les gusta? ¿O, cuando una empleada doméstica vuelve a su casa y tiene que pagar a las maras para entrar su barrio, caso contrario la matan o violan?¿O, cuando los maleantes ven un auto caro y secuestran al dueño?
Los cruceños estamos sacándonos los ojos, con ira, como jamás había sucedido antes, porque siempre habíamos sido un ejemplo de unidad. Todo porque estamos siendo víctimas de una Bolivia sin respeto a la ley o con leyes amañadas, que solamente obedecen a los dictados de este Gobierno ambicioso e irresponsable, que maneja la justicia a su gusto, como un arma letal para amedrentar o ejecutar a sus adversarios.
Los cruceños estamos sacándonos los ojos, con ira, como jamás había sucedido antes, porque siempre habíamos sido un ejemplo de unidad. Todo porque estamos siendo víctimas de una Bolivia sin respeto a la ley o con leyes amañadas, que solamente obedecen a los dictados de este Gobierno ambicioso e irresponsable, que maneja la justicia a su gusto, como un arma letal para amedrentar o ejecutar a sus adversarios.