Actualidad
El Gobierno nacional respondió este jueves al dirigente cocalero, Evo Morales, y le recordó que en reiteradas ocasiones se le convocó a entablar el diálogo, invitaciones que fueron desoídas antes de asumir la medida de presión extrema que está "estrangulando" la economía de los bolivianos.
¿La difícil situación que atraviesa el país amerita una declaratoria de estado excepción? Hoy se cumplen 18 días de bloqueo evista que han aislado a Cochabamba, esto impide la llegada de alimento y otros insumos de primera necesidad, a esto se suma que los policías han abandonado el Chapare y los militares son hostigados por los cocaleros. 
Tras el pedido del expresidente Evo Morales para que los ministros renuncien a sus cargos, varios miembros del Gabinete respondieron que no dejarán sus despachos, reiteraron su lealtad a Luis Arce y afirmaron que "no escaparán".
Tras el pedido del expresidente Evo Morales para que los ministros renuncien a sus cargos, varios miembros del Gabinete respondieron que no dejarán sus despachos, reiteraron su lealtad a Luis Arce y afirmaron que "no escaparán".
Los bloqueadores evistas retomaron la tarde de este jueves los bloqueos en Mairana, Santa Cruz, tras un cuarto intermedio de tres horas.
Los cocaleros rodearon las instalaciones militares del trópico.
Opinión

El reciente caso de violación sufrido por una niña de 10 años, a manos de su hermano de 15, sumado a otros en los que es patente la soledad de las involucradas propicia una reflexión acerca de las circunstancias intrafamiliares que suscitan esos dramas.

Puntos de Vista

Con motivo del censo, se han agudizado los conflictos limítrofes entre varios municipios del país. Si bien los orígenes de estas disputas son diversos y de larga data, los pocos que cuentan con leyes de creación que establezcan claramente sus límites son la excepción a una regla que afecta a la mayoría de los municipios.

Con motivo del censo, se han agudizado los conflictos limítrofes entre varios municipios del país. Si bien los orígenes de estas disputas son diversos y de larga data, los pocos que cuentan con leyes de creación que establezcan claramente sus límites son la excepción a una regla que afecta a la mayoría de los municipios.

Los abogados postulantes a los máximos tribunales de justicia tienen que demostrar que hablan un idioma oficial distinto al castellano cumpliendo con la previsión constitucional, pero detrás de este requisito languidece la política, también constitucional, de fomentar la diversidad cultural y la inclusión de los seres que pertenecen a una veintena de pueblos originarios. Esta política nunca se planificó y menos se implementó en las instancias gubernamentales.

Los abogados postulantes a los máximos tribunales de justicia tienen que demostrar que hablan un idioma oficial distinto al castellano cumpliendo con la previsión constitucional, pero detrás de este requisito languidece la política, también constitucional, de fomentar la diversidad cultural y la inclusión de los seres que pertenecen a una veintena de pueblos originarios. Esta política nunca se planificó y menos se implementó en las instancias gubernamentales.

Con Adalberto compartí en Italia la preparación al voluntariado (aprendiendo el idioma español y algo de la historia y problemática de América Latina) y, ya en Bolivia -país que ambos escogimos para realizar nuestro servicio civil por cuenta del gobierno italiano-, convivimos en El Alto, durante dos años.

Con Adalberto compartí en Italia la preparación al voluntariado (aprendiendo el idioma español y algo de la historia y problemática de América Latina) y, ya en Bolivia -país que ambos escogimos para realizar nuestro servicio civil por cuenta del gobierno italiano-, convivimos en El Alto, durante dos años.

La CIDH lo ha dicho varias veces y hay más de 350 bolivianos que lo padecen: la “justicia” boliviana abusa del recurso de la “detención preventiva”.

Los expertos interamericanos lo dicen ahora cuando acaban de entregar sus nuevas recomendaciones sobre el estado de la justicia en Bolivia, un estado lamentable.

La CIDH lo ha dicho varias veces y hay más de 350 bolivianos que lo padecen: la “justicia” boliviana abusa del recurso de la “detención preventiva”.

Los expertos interamericanos lo dicen ahora cuando acaban de entregar sus nuevas recomendaciones sobre el estado de la justicia en Bolivia, un estado lamentable.