La visita de Boca Juniors para jugar por la Copa Sudamericana con Nacional de Potosí levantó inusitada expectativa que se reflejó, entre otras cosas, en los precios de las entradas y en el viaje de muchas personas de otras ciudades para ver el lance, algunas de las cuales hicieron barra por los xeneizes. Pese al desprecio que muchos argentinos (Messi entre ellos) sienten por los bolivianos y a que Boca jugó con suplentes y juveniles, Potosí mostró nuevamente su hospitalidad; no en vano su himno dice que Potosí es “asilo del proscrito”.
Este evento también fue y es motivo para que cierto periodismo argentino, en medio de ciertas verdades, incurra en evidentes exageraciones.
Potosí está a 4.000 metros sobre el nivel del mar y esa altitud afecta el rendimiento de deportistas, aunque varias veces equipos argentinos han ganado muy bien en tales condiciones. El último ejemplo: Argentina ganó 3-0 a Bolivia en La Paz, en 2023.
Llegar a Potosí es complicado porque no cuenta con un aeropuerto al que puedan arribar vuelos internacionales. Motivo para preguntar por qué ocurre ello y responder que los gobiernos nunca se interesaron por la suerte de Potosí, incluidos los del MAS, pese a que peroran ser del pueblo, de los humildes, de los necesitados, de los pobres, de los postergados y en la práctica demuestren precisamente lo contrario. ¿Qué presidente trató peor a Potosí?: Sí, Evo Morales.
Potosí no tiene hoteles capaces de albergar una delegación numerosa como la de Boca Juniors, lo que no significa negar la existencia de muy buenos hoteles y hostales en la ciudad.
Luego de esto, obviamente exageran los periodistas argentinos cuando se refieren a la carretera Sucre Potosí como una ruta digna del rally Dakar, señalando que es un camino de montaña, sinuoso y peligroso. El desgraciado hecho ocurrido el domingo 31 de marzo, que causó cuatro muertos y varios heridos, fue a dar material a algún periodista boquense para escribir en el diario Olé: “Es lo que faltaba para poder afirmar que es una locura que Boca o cualquier (sic) tenga que hacer 155 kilómetros por una difícil y peligrosa ruta para llegar a jugar un partido de una de las dos principales competencias del fútbol sudamericano”. En la edición del día siguiente había cambiado su versión.
Pero, así como hay exagerados, es justo reconocer que existen periodistas argentinos que dijeron que la ruta entre Sucre y Potosí es moderna, muy bien señalizada y con un paisaje hermoso, lo que demuestra que quienes pretenden hacer una equivalencia entre esta carretera y el “camino de la muerte” están excediéndose en sus comparaciones.
En 2017, Estudiantes de la Plata (cuatro veces ganador de la Copa Libertadores de América) llegó en iguales condiciones a enfrentar también a Nacional Potosí. Argentinos Juniors jugó en el viejo estadio de la calle Sucre de Potosí en la década del 50, lo mismo que varios otros equipos argentinos, ninguno de los cuales llegó en avión. La llamada “Selección Fantasma Argentina”, que contaba con figuras como Fillol, Glaría, Tagliani, Chirdo, Trobbiani, Galván, Bochini, Kempes, Poy, Cortez y Rocha, jugó en Potosí en 1973; llegó (y se fue) en bus y ganó caminando 3-1 a Independiente Unificada, en aquel año el mejor equipo potosino de fútbol. En 1976, Independiente de Avellaneda llegó para el aniversario de Unificada en bus hasta
Potosí y jugó dos partidos. En ese equipo jugaban, entre otros, Bochini y Bertoni y el DT era Omar “Pato” Pastoriza.
Boca no es el primer grande de Sudamérica que jugará en Potosí. En el recuento podemos mencionar también a Peñarol que cayó goleado 6-1 ante Real Potosí en 2002. También San Lorenzo de Almagro, en 2002 y en 2008, y Flamengo, en 2012 (enfrentando a Real Potosí).
Por lo demás, es bueno recordar que la hermana República Argentina debe su nombre a la plata del Cerro Rico de Potosí que, desde inicios del siglo XVI, contribuyó ¡y cómo! a la consolidación del sistema capitalista mundial. Revisen (no cuesta nada) la página web del gobierno argentino. Asimismo, debemos hacer saber a los xeneizes que, en su recorrido entre Sucre y Potosí, pasaron muy cerca de Otuyo, la población en la que nació Cornelio Saavedra, presidente de la Primera Junta de las Provincias Unidas del Río de la Plata y primer presidente de la Junta Grande de ese país. De manera que los boquenses jugaron en la tierra que le dio nombre a su país y pasarán cerca del pueblo donde nació su primer presidente.
Disfruten, amigos argentinos, del paisaje y el camino entre Sucre y Potosí, y de la hospitalidad del pueblo potosino. Nosotros disfrutaremos del triunfo de Nacional Potosí.