A nivel organizacional, muchos gerentes de hospital o centros de salud siempre quieren mejorar el servicio. De hecho, los cursos de gerencia estratégica enseñan a mejorar los procesos y volverlos más eficientes. Pero muchas veces no se piensa en el impacto especifico que esto puede traer para el paciente.
Cuando un centro de salud u hospital realiza una mejora, puede afectar severamente al paciente. Voy a explicarlo con algunos puntos bajo un ejemplo. Si hay un cambio en la forma de tomar las muestras de sangre/orina, por ejemplo, y ponerlas a disposición del paciente por internet, esto puede mejorar el acceso a los estudios y resultados en menor tiempo.
1. Resultados clínicos: Pueden involucrar temas de seguridad de datos personales, o también que los resultados no puedan leerse bien en la pantalla o que los pacientes no sepan leerlos, por lo que no podrán seguir bien el tratamiento.
2. Impacto funcional y social: Por ejemplo, si los resultados ya no necesitan imprimirse es un gran ahorro a los centros de salud, pero también coarta el acceso a las personas que no tienen internet en una computadora. Por ello es importante verificar que los resultados sean legibles en el teléfono móvil, donde más personas tienen conexión de internet. Temas como acceso, equidad, alcance son aspectos que deben tomarse en cuenta antes de lanzar los resultados. ¿Y qué tal si hay analfabetismo en una parte de la población? ¿Cómo volvemos funcionales los resultados sin estigmatizar a esa población o vulnerabilizarlos frente a sus familiares que les ayudan a leer los resultados?
3. Adherencia y cambios de comportamiento: es importante que tanto el personal como los pacientes se acostumbren a la nueva forma de archivar los datos y, por tanto, aspectos como las historias clínicas o progresiones o mejoras en la enfermedad puedan tomarse en cuenta y beneficiar así paciente y ayudar al médico a desempeñar un trabajo más eficiente. Por ejemplo, leer la situación de salud no sólo en un solo punto en el tiempo, sino también las tendencias de salud en los últimos años, lo que ayuda a evaluar la capacidad de adoptar cambios de comportamiento recomendados (dieta, ejercicio, etc.) y poder hablar de dificultades que los pacientes tienen para seguir las recomendaciones o adherencia a los medicamentos.
4. Transiciones a la salud digital: una mejora siempre es bienvenida. Pero la tecnología por sí misma no hará las mejoras, sino que es importante implementarlas en diferentes aspectos de la salud y mejora de la atención en salud para el paciente. Y con esto, también es importante medir cómo se impacta diferentes aspectos al paciente, no solo pensando en lo obvio sino también en los detalles que a veces no pensamos.