En su informe de cuatro años de gestión el presidente Luis Arce se refirió a los bloqueos de parte de sectores afines a Evo Morales y sus efectos en la economía. El mandatario informó que dichas movilizaciones este año ocasionaron una pérdida de cuatro mil millones de dólares.
"Solo este año, los bloqueos del evismo han costado cerca de 4.000 millones de dólares a nuestro Estado Plurinacional de Bolivia", sostuvo.
Este año, el evismo ha protagonizado al menos dos bloqueos, el primero duró 16 días y el segundo, 24. El sector pedía inicialmente una respuesta a su pliego petitorio, luego, exigió adelantar las elecciones presidenciales.
En su informe, el mandatario dijo además que algunas personas llegaron a la "deformación de la oposición" y rechazaron toda propuesta o iniciativa en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), sin importar el perjuicio a la gente, haciendo referencia a los créditos.
El evismo cumple un cuarto intermedio a los bloqueos y amenazó con iniciar nuevamente la presión en caso de que no se concrete el diálogo entre su sector y el Gobierno.
Los potosinos celebran pasado mañana, domingo 10 de noviembre, la efeméride cívica de su departamento que conmemora en esa fecha la insurrección que hace 214 años protagonizaran sus ancestros contra la corona española para sumarse al movimiento que desde Buenos Aires proclamaba la ruptura de los vínculos que hasta entonces los unían al Virreinato de Lima.
ENRIQUE VELAZCO RECKLING
La primera elección judicial, medida por la calidad del sistema de justicia, fue un rotundo fracaso reconocido en 2017 por el entonces vicepresidente, quien no ahorró adjetivos atribuyendo a ese primer proceso la “pestilencia” de la justicia boliviana. Sabemos ahora que, tan inusual desborde de honestidad, solo buscaba alentar la participación ciudadana en la segunda elección bajo la promesa que se corregirían errores y se nos devolvería una justicia acorde con la Constitución.
La primera elección judicial, medida por la calidad del sistema de justicia, fue un rotundo fracaso reconocido en 2017 por el entonces vicepresidente, quien no ahorró adjetivos atribuyendo a ese primer proceso la “pestilencia” de la justicia boliviana. Sabemos ahora que, tan inusual desborde de honestidad, solo buscaba alentar la participación ciudadana en la segunda elección bajo la promesa que se corregirían errores y se nos devolvería una justicia acorde con la Constitución.
CARLOS HUGO MOLINA
El jueves 27 de abril presentaré la segunda edición de Un cafetal del tamaño de Bolivia, esta vez en Sucre. La publicación tiene como subtítulo y su relación con el turismo y las ciudades intermedias para recordarnos que hemos descuidado la ecuación entre población, territorio y desarrollo, y que el error nos está pasando factura.
El jueves 27 de abril presentaré la segunda edición de Un cafetal del tamaño de Bolivia, esta vez en Sucre. La publicación tiene como subtítulo y su relación con el turismo y las ciudades intermedias para recordarnos que hemos descuidado la ecuación entre población, territorio y desarrollo, y que el error nos está pasando factura.