El Ejército israelí mató este martes a 17 miembros de una misma familia en el campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, incluidos 14 menores y mujeres, según las autoridades del grupo islamista Hamás, que controla el enclave.
En un comunicado, Hamás condenó "las masacres y crímenes contra civiles" por parte de Israel, y reiteró su llamamiento a la ONU y a la comunidad internacional para que presionen al país para detener la guerra.
Según Hamás, los 17 muertos formaban parte de la familia Abu Freih. En todo el centro de Gaza han muerto en las últimas horas al menos 29 personas, después de que las autoridades israelíes animasen a los residentes del norte del enclave a desplazarse hacia el sur ante la intensificación de los combates en la ciudad de Gaza.
En toda la Franja han muerto al menos 50 personas en las últimas 24 horas, lo que eleva la cifra total de muertos desde el comienzo de la guerra a 38.243 personas, según las autoridades sanitarias del enclave.
Además, se estima que miles de cuerpos permanecen enterrados bajo los escombros.
Tanto al norte, en la ciudad de Gaza, como al sur, en Rafah, Israel mantiene sus principales operaciones en el devastado enclave palestino.
En la capital, el Ejército dijo hoy haber eliminado a "más de 150 milicianos" en combates a corta distancia en sus operaciones en el barrio de Shujaiya, al que volvió a combatir hace casi dos semanas a pesar de haber dado por neutralizadas a las facciones palestinas en otras dos ocasiones.
En Rafah, en el extremo meridional de la Franja, un ataque aéreo contra el barrio de Tal al Sultan (oeste) mató a otras tres personas, mientras que el Ejército dijo en un comunicado haber eliminado a "decenas de terroristas" en combates a corta distancia en el enclave.