En un clima político cada vez más tenso y en el que los enfrentamientos a pedradas se hacen cada vez más frecuentes, afines al presidente Luis Arce exigen la aprehensión del expresidente Evo Morales, quien encabeza su masiva marcha hacia el centro político del país, donde ingresaría este lunes.
El líder cocalero, a su vez, afirmó que recibió el apoyo de vecinos de Ventilla, en las afueras de la ciudad de El Alto, quienes se enfrentaron con miembros del Pacto de Unidad y supuestos funcionarios públicos que respaldan a Arce. Morales, en contacto con la prensa, aseguró que para hoy serán alrededor de un millón de personas marchando hacia La Paz.
Durante la concentración realizada en Ventilla, los asistentes resolvieron expresar su respaldo al actual gobierno y exigieron la aprehensión de Morales. “Se ha determinado que tanto el Ministerio Público, el Ministerio de Gobierno, y nuestros hermanos de la Policía, como brazo operativo, hagan cumplir nuestra Constitución Política del Estado y puedan aprehender a este señor (Morales) que está incitando a la violencia, está creando sedición y un intento de golpe”, informó el dirigente campesino Guery García, citado por ABI.
Esta postura marca un punto álgido en las disputas internas del Movimiento al Socialismo (MAS), donde las facciones leales a Arce y Morales han escalado sus diferencias.
La jornada estuvo marcada por intensos enfrentamientos en las calles de Ventilla, donde “los arcistas” se enfrentaron violentamente con “los evistas”. La cifra según fuentes oficiales es de al menos ocho personas heridas.
Los choques dejaron una escena caótica en la zona, evidenciando la profunda fractura que divide al oficialismo. Sin embargo, algunos testigos aseguran que no solo los seguidores de Morales estuvieron presentes en los enfrentamientos. Vecinos del lugar también habrían participado, resistiéndose ante lo que ellos consideraban una invasión de funcionarios públicos afines al presidente Arce.
El cabildo en Ventilla fue convocado con el objetivo de demostrar la fuerza del sector leal al actual mandatario
Mientras tanto, Evo Morales, enterado de lo que ocurría en las afueras de El Alto, agradeció el apoyo de “los paceños” que -según él- respaldan su liderazgo.
Además, Morales anticipó que la jornada hoy, lunes, será crucial, ya que, según él, alrededor de 1 millón de personas se movilizarán hacia La Paz en una demostración de fuerza a favor de su figura y en contra de la situación económica que afronta el gobierno de Arce.
“Mañana va a ser más de un millón, impresionante, la mejor marcha, la más grande de la historia”, manifestó Morales bajo el granizo que los recibía a unos siete kilómetros de donde se suscitaban los enfrentamientos.
Morales no se mostró abierto a dialogar con Arce, pese a las continuas invitaciones que se le hizo. Lo que sí expresó fue una abierta invitación a que el presidente llegue a la marcha para conversar, lo cual, por la violencia registrada en días pasados, fue rechazado por el primer mandatario.
Gobierno reitera invitación a diálogo
La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, volvió a invitar al expresidente Evo Morales a un diálogo en un lugar neutro para conversar sobre el pliego petitorio de la marcha y buscar una solución. La posición de Morales es que Arce asista a la marcha misma para entablar el diálogo.
Alcón reiteró que esa posibilidad está descartada y recordó que en sus 14 años de gobierno, Morales no asistió a una reunión en una marcha.
El defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, también reiteró su invitación a mediar en un diálogo entre ambos bandos enfrentados; lo cual fue indirectamente rechazado por Morales. “Yo extraño a la defensora del Pueblo Ana María Romero de Campero. Ella se unía con nosotros a la marcha, al pueblo, eso es lo que debería hacer el defensor”, declaró a la prensa.
Hasta el cierre de ayer no había vistos de que el diálogo entre Evo y Arce se instalara, y para hoy se espera la llegada de la marcha.