El secretario de Salud de la Gobernación de Cochabamba, Nelson Ticona, dijo ayer que buscan alternativas para cubrir el déficit de ítems para el personal de salud en el departamento.
Señaló que los ítems del personal médico son designados por el Ministerio de Salud desde el año 2007 y no se considera el crecimiento vegetativo. A esto se suma que los ítems que eran designados a partir de los recursos por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) también se verán afectados.
Ticona explicó que al no poder cubrir el déficit de personal de salud en los distintos niveles, desde el Ministerio de Salud han solicitado a las alcaldías y gobernaciones que “busquen alternativas”.
“Probablemente la estrategia que se podría utilizar es que los gobiernos municipales y las gobernaciones puedan buscar una alternativa de contratar consultores en líneas y poder cubrir el déficit”, sostuvo.
La intención es garantizar los recursos para contratar personal de salud, incluso como consultores en línea. Ticona adelantó que desde la Gobernación analizan alternativas para contar con personal en los hospitales de tercer nivel.
El río Rocha que en el pasado inspiró canciones y bañaba el valle de Cochabamba; ahora, parece agonizar frente a todos. Ya no queda nada de su corriente caudalosa y sin olor; es más, en la época seca parece un arroyo de aguas negras, fétidas y estancadas.
El río es parte de la cuenca del mismo nombre y su cauce principal atraviesa la región metropolitana de Cochabamba, la más poblada del departamento, lo que lo hace más vulnerable a las acciones humanas e industriales.
DANIELA MURIALDO LÓPEZ
No hablaré del tiempo, pues sobre él se ha escrito ya tanto. En filosofía, en literatura, en astronomía. Hablaré de su escasez, de los pocos momentos de completo ocio.
No hablaré del tiempo, pues sobre él se ha escrito ya tanto. En filosofía, en literatura, en astronomía. Hablaré de su escasez, de los pocos momentos de completo ocio.
Encuentro con cierta frecuencia a loquitos que superan los límites de lo razonable en cuanto a celos (límites bastante amplios en esta cultura nuestra tan autoritaria y proclive a la desconfianza). Uno de los síntomas más sorprendentes, especialmente entre los jóvenes, es la exigencia de conocer las claves del mail y redes sociales de la pobre víctima de tanto “amor”. Parece que existe el derecho humano a revisar el celular de la pareja.
Encuentro con cierta frecuencia a loquitos que superan los límites de lo razonable en cuanto a celos (límites bastante amplios en esta cultura nuestra tan autoritaria y proclive a la desconfianza). Uno de los síntomas más sorprendentes, especialmente entre los jóvenes, es la exigencia de conocer las claves del mail y redes sociales de la pobre víctima de tanto “amor”. Parece que existe el derecho humano a revisar el celular de la pareja.
MARKO QUIROGA BERAZAÍN
Es urgente establecer un diálogo público multiescalar, de interacción y compromiso multiactoral, con madurez institucional y comunitaria, que permita entender la complejidad del territorio en los aspectos económicos, productivos y socioculturales, con el objetivo de concebir un modelo de sustentabilidad participativo y de largo plazo como política integral, que destaque varios aspectos.
Es urgente establecer un diálogo público multiescalar, de interacción y compromiso multiactoral, con madurez institucional y comunitaria, que permita entender la complejidad del territorio en los aspectos económicos, productivos y socioculturales, con el objetivo de concebir un modelo de sustentabilidad participativo y de largo plazo como política integral, que destaque varios aspectos.
ENRIQUE FERNÁNDEZ GARCÍA
Desde hace algunos años, sin exagerar, parece que la vida nos ha condenado a soportar crisis de toda naturaleza. Podemos hablar de política, obviamente, mas también considerar otros temas, tanto económicos como médicos. Aclaro que no pienso en la utopía de una existencia sin problemas. La satisfacción de cualquier necesidad conlleva que afrontemos dificultades, sean estas mayores o menores; por tanto, los obstáculos jamás desaparecerán para siempre. La cuestión es que, a veces, son demasiados.
Desde hace algunos años, sin exagerar, parece que la vida nos ha condenado a soportar crisis de toda naturaleza. Podemos hablar de política, obviamente, mas también considerar otros temas, tanto económicos como médicos. Aclaro que no pienso en la utopía de una existencia sin problemas. La satisfacción de cualquier necesidad conlleva que afrontemos dificultades, sean estas mayores o menores; por tanto, los obstáculos jamás desaparecerán para siempre. La cuestión es que, a veces, son demasiados.