El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, justificó el incremento de precios en alimentos por factores como el contrabando a la inversa, el cambio climático y la situación económica global. Según Montenegro, productos nacionales con precios más bajos que en países vecinos están siendo comercializados de manera ilegal en el extranjero, lo que afecta la disponibilidad y precio en el mercado interno.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación en Bolivia alcanzó un 5,53% hasta septiembre. Entre los productos que han experimentado un incremento notable se encuentran el arroz (8,73%), la carne de res sin hueso (1,72%), los pañales desechables (11,26%) y el tomate (5,28%). Montenegro también atribuyó el aumento de precios a la crisis climática y a los bloqueos de carreteras, que han dificultado la distribución de productos perecederos como el pollo. Factores como la reducción en la producción de insumos agrícolas, incluyendo sorgo y soya, también han contribuido a este incremento.
El ministro señaló que, mientras en Bolivia el precio del arroz es de aproximadamente $us 1,69 por kilogramo, en Argentina y Chile se cotiza a $us 3,09 y $us 2,43, respectivamente. Esta diferencia, indicó, incentiva el contrabando hacia estos países, especialmente de productos como el arroz, el ganado en pie y el huevo.
Montenegro también resaltó que la inflación global y los costos de fletes marítimos, que no han retornado a los niveles previos, influyen en la inflación boliviana. Además, mencionó que el reciente conflicto en Medio Oriente podría agregar presiones adicionales a la economía mundial y, por consiguiente, a la economía boliviana.