Fernando Camacho Parada, hijo del gobernador cruceño Luis Fernando Camacho Vaca, denunció este lunes que su familia es víctima de presiones y seguimiento, por lo que responsabilizó al Gobierno por si algo llegara a pasarles.
La denuncia surge en momentos en que se discute la suplencia temporal en la Gobernación de Santa Cruz, para que el vicegobernador Mario Aguilera reemplace a Camacho, quien cumple una detención preventiva por el caso "golpe de Estado I" desde fines de diciembre de 2022.
"Queremos denunciar que estamos siendo víctimas de presiones y se seguimientos y responsabilizamos al Gobierno y sus fuerzas de seguridad de esta situación irregular e ilegal", afirmó el hijo de Camacho a través de un video difundido por redes sociales.
Camacho hijo resaltó que todos los hijos y familiares del Gobernador de Santa Cruz no cumplen ninguna función pública, pues se dedican a sus actividades privadas estamos y a terminar sus estudios.
"Creemos que estos seguimientos y presiones tienen como objetivo quebrar la moral y la resistencia de nuestro padre que hoy está secuestrada por el Gobierno. La idea de doblegar a mi padre en su lucha presionando a sus hijos y su familia no sólo es una actitud vengativa, sino inútil, porque no conseguirán nada", añadió.
En ese sentido, indicó que hacen pública esta situación "por sí algo llegara a pasarnos" para que la opinión pública y los cruceños conozcan la forma en que actúa el Gobierno y sepa quiénes son los responsables.
Los industriales calculan que el país pierde más de 50 millones de dólares diarios con los bloqueos que constantemente se instalan en las carreteras del territorio nacional, y que ellos, como sector empresarial, participan de la afectación con 10 millones de dólares.
DANIELA MURIALDO LÓPEZ
Ojeé hace unas semanas la entrevista en El País a la diseñadora de modas Elena Benarroch, pese a que dejé de leer ese medio español, desde que se convirtió en un panfleto sanchista (que apoya al presidente del Gobierno español). Aun así, me llamó la atención el titular entrecomillado: “Es una gilipollez pensar que si eres rico no puedes ser de izquierdas”.
Ojeé hace unas semanas la entrevista en El País a la diseñadora de modas Elena Benarroch, pese a que dejé de leer ese medio español, desde que se convirtió en un panfleto sanchista (que apoya al presidente del Gobierno español). Aun así, me llamó la atención el titular entrecomillado: “Es una gilipollez pensar que si eres rico no puedes ser de izquierdas”.
MARCELO GONZALES YAKSIC
Muchos de los burócratas bolivianos, especialmente los que rondan el aparato estatal del nivel central, son parte de unas redes de poder y mantienen relaciones personales que les permiten empernarse en sus puestos de trabajo si es posible hasta la muerte natural del individuo.
Muchos de los burócratas bolivianos, especialmente los que rondan el aparato estatal del nivel central, son parte de unas redes de poder y mantienen relaciones personales que les permiten empernarse en sus puestos de trabajo si es posible hasta la muerte natural del individuo.
Lo sucedido el miércoles 26 quieren que sea entendido únicamente si nos adscribimos a una de las dos teorías que ya nos envuelven. Lejos de la libertad de comprender la coyuntura, el contexto y sus factores determinantes, diversos intereses quieren imponer un fórceps mental de acatamiento de narrativas verticales. El pensamiento superficial observa lo sucedido en monocolor, en sí o en no, en blanco o negro. Y entre las dos narrativas del bitono, la desesperación para imponer el color preponderante.
Lo sucedido el miércoles 26 quieren que sea entendido únicamente si nos adscribimos a una de las dos teorías que ya nos envuelven. Lejos de la libertad de comprender la coyuntura, el contexto y sus factores determinantes, diversos intereses quieren imponer un fórceps mental de acatamiento de narrativas verticales. El pensamiento superficial observa lo sucedido en monocolor, en sí o en no, en blanco o negro. Y entre las dos narrativas del bitono, la desesperación para imponer el color preponderante.
HUMBERTO VACAFLOR GANAM
Quizá sea cierto que salió en el puesto 48 de su promoción en el colegio militar, o 68, como dicen otros, pero Juan José Zúñiga, si sabe algo, es dejar mensajes ocultos, o encriptados, como se dice ahora.
Mensaje número uno: ha dejado muy claro que, por muy malo que sea el golpe, incluso si no es hecho como Dios manda, se hace con tanquetas en las calles, que también pueden servir para abrir una puerta si has olvidado la llave.
Quizá sea cierto que salió en el puesto 48 de su promoción en el colegio militar, o 68, como dicen otros, pero Juan José Zúñiga, si sabe algo, es dejar mensajes ocultos, o encriptados, como se dice ahora.
Mensaje número uno: ha dejado muy claro que, por muy malo que sea el golpe, incluso si no es hecho como Dios manda, se hace con tanquetas en las calles, que también pueden servir para abrir una puerta si has olvidado la llave.