La llegada de Juliana Barrientos, Miss Bolivia Universo 2024, a Cochabamba el viernes en la mañana fue un evento lleno de emoción y orgullo.
La cochabambina que ha traído la máxima corona del certamen de belleza de vuelta a su tierra natal fue recibida en el aeropuerto por Elite Company, sus familiares y una multitud de seguidores.
Con rosas, carteles y una pequeña demostración del baile típico de Cochabamba, Juliana fue recibida con los brazos abiertos.
A su llegada, la reina de belleza posó para las cámaras y se tomó fotografías con todos los que se lo pedían. La alegría y el carisma de Juliana se hicieron evidentes mientras sonreía y compartía momentos con sus seguidores. Posteriormente, a medio día, se organizó un almuerzo en Patrimonio, donde compartió con la prensa y sus compañeras vallunas del concurso.
“(Estoy) realmente agradecida, feliz por todo el apoyo que estamos recibiendo todos estos meses, todas las personas que han sido parte de este camino y también a las que se van sumando, agradecerles de corazón, realmente han sido una fuerza y una motivación para mí y sin duda no es tan fácil agradecerles a todos”, expresó en el recibimiento.
“Ahora que ya me llamo Bolivia, primeramente llamándome Miss Cochabamba, sentí mucho apoyo y cariño. Llegó un punto donde yo quería quizás meterme en un rol, pero dije, voy a ser yo misma”, añadió.
También se dirigió a las niñas y jóvenes de Bolivia: “Quiero que se inspiren, que se enfoquen y que nada es imposible. Lo importante es mantenerse fiel a sus ideales, fiel a sus principios, fiel a su personalidad también. Yo decidí ser yo misma desde el día uno y bueno, creo que en el transcurso del tiempo me he ganado el apoyo de todas las personas.”
Juliana también habló sobre sus proyectos sociales.
“Algo que me encanta de esta plataforma es que justamente es una belleza con propósito. Ahora estamos viendo la forma de que el proyecto tome fuerza, tome más impulso. He estado trabajando no solo en mi proyecto, sino en varios proyectos, porque digo, quiero aprovechar este año para hacer todo lo que siempre he querido hacer”, señaló.
Las compañeras de Juliana también fueron reconocidas por su notable participación en el Miss Bolivia, recibiendo reconocimientos por parte de Elite Company.
Al final de la tarde, Juliana se dirigió a la plaza principal, donde compartió pastel y api con la gente de a pie, de bajos recursos y niños que la abrazaron con cariño. Este gesto finalizó un día lleno de emociones y celebraciones, consolidando su conexión con la gente de Cochabamba.