El expresidente Evo Morales lidera este viernes el cuarto día de marcha rumbo a ciudad La Paz para exigir su habilitación como candidato para las elecciones de 2025.
La marcha de Evo partió el martes desde la localidad de Caracollo, en Oruro, llegó el miércoles hasta el pueblo de Lahuachaca, a unos 125 kilómetros de La Paz, y el jueves siguió hasta la población de Patacamaya, a unos 97 kilómetros, donde los manifestantes pernoctaron, hoy la marcha partió desde Ayo Ayo.
Los seguidores de Morales sostienen que es una marcha para "salvar a la patria" ante problemas como la escasez de dólares y combustible y el encarecimiento de algunos productos básicos, y también exigen que se respeten las resoluciones de un congreso del MAS realizado el año pasado -no reconocido por el Tribunal Electoral- en el que definieron la candidatura de Morales para 2025.
El citado congreso, anulado por el órgano electoral, se realizó en el Trópico de Cochabamba, el bastión sindical y político del exmandatario, en ausencia del presidente boliviano, Luis Arce, y del vicepresidente, David Choquehuanca, en medio de las tensiones internas en el MAS.
El Gobierno de Arce considera que la marcha promovida por Morales antecede un "intento de golpe de Estado", con la intención de que asuma la Presidencia del país el titular del Senado, Andrónico Rodríguez, que es afín al exgobernante, para habilitar así su candidatura.
Morales y Arce están distanciados desde finales de 2021 por diferencias en la Administración del Estado que se profundizaron ante la necesidad de renovar la dirección nacional del MAS, aún en manos del expresidente, algo en lo que las facciones leales a ambos no han podido ponerse de