Cada año, el cuarto jueves del mes de abril marca una celebración significativa en el mundo de la tecnología: el Día Internacional de las Niñas en las TIC. Esta iniciativa, respaldada por los Estados Miembros de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), busca impulsar un cambio tangible en el panorama tecnológico global.
Desde su establecimiento en el año 2014, el objetivo fundamental del Día Internacional de las Niñas en las TIC es fomentar un entorno que empodere a las niñas y mujeres, brindándoles la orientación y motivación necesarias para forjar una carrera exitosa en el campo en constante expansión de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).
Este día es una ocasión para reflexionar sobre el papel crucial que desempeñan las mujeres en el ámbito tecnológico y para impulsar acciones concretas que promuevan su participación activa y su liderazgo en este sector. Para profundizar en este tema, conversamos con María René Torrez, mentora, instructora, docente y promotora de la capacitación de niñas en el mundo digital, quien compartió su visión sobre la importancia de este día y los desafíos que aún enfrentamos en materia de igualdad de género en la tecnología.
Además, cuatro jóvenes inspiradoras: María Renée Iriarte, Sandra Arias, Colomba Deride y Camila Lizarazu, compartieron sus experiencias y desafíos, destacando la importancia de contar con modelos a seguir y oportunidades de aprendizaje en este campo en constante evolución.
“Uno de los más grandes desafíos que encontré al momento de enseñar a niñas en tecnología es el preconcepto que tenían muchos de que solo los chicos podían hacer este tipo de actividad”, expresó Torrez. “Luego, otro desafío fue romper ese esquema y proponer que niñas y jovencitas participen en eventos que no se esperaba que fueran ellas”.
La falta de espacios formales para niñas en el ámbito tecnológico en los años anteriores a 2015 y 2016 fue un obstáculo significativo. “Ha habido un boom en estos últimos años en los que encontramos espacios seguros, donde puedes estar con niñas, pero oficialmente en esa época no había”, señaló Torrez.
Para fomentar el interés de las niñas en las TIC, Torrez destacó la importancia de compartir experiencias reales y motivadoras. “Una de las cosas que hice para que las niñas estén seguras, fue que les hablaba mucho sobre mis experiencias, sobre lo que se vive en el mundo real”, explicó. “He usado mucho videos motivacionales que se usan en otros lugares, en Europa, en Estados Unidos, en Asia, donde las jovencitas realmente son muy talentosas y obviamente ya han roto el esquema”.
EL EMPODERAMIENTO A TRAVÉS DE LA EDUCACIÓN EN TECNOLOGÍA
“Un consejo que daría es que las niñas se encuentren en este espacio donde puedan desarrollarse bien, ya sea en ciencia o en tecnología”, dijo Torrez. Destacó la importancia de encontrar un entorno seguro y de apoyo para las niñas interesadas en la tecnología, y señaló que la inclusión de las niñas en este campo puede tener un impacto transformador en la sociedad en general.
Torrez tiene una visión de una industria tecnológica más inclusiva y equitativa. “Una cuestión que me gustaría destacar es que, si bien se están produciendo avances, aún persiste la realidad de que resulta más difícil para una mujer encontrar su lugar en la industria tecnológica”, señaló. Abogó por la eliminación de limitaciones y estigmas que enfrentan las mujeres en el campo tecnológico, y enfatizó la importancia de preparar tanto a las mujeres como a las empresas para un entorno laboral más igualitario.
La labor de María René Torrez destaca la importancia de crear espacios inclusivos y seguros para las niñas en el campo de las TIC, así como el impacto positivo que puede tener el empoderamiento de las mujeres a través de la educación en tecnología en la sociedad en general.
Desde una edad temprana, Sandra Arias encontró en la tecnología una fuente de inspiración y fascinación. “Siento que la tecnología tiene el poder de facilitar la vida de las personas y crear conexiones significativas en todo el mundo. Eso fue lo que inicialmente me atrajo hacia este campo”.
Una de las experiencias más emocionantes para Sandra fue cuando participó en el desarrollo de una aplicación prototipo destinada a ayudar a los familiares de personas con Alzheimer a encontrar a sus seres queridos en caso de extravío. Fue su primer contacto con las redes neuronales y la inteligencia artificial, lo que amplió su comprensión del potencial de la tecnología.
Sandra señala que el campo de la tecnología es vasto y diverso, con numerosas oportunidades emocionantes esperando ser exploradas. Por ello, alienta a otras jóvenes y niñas a seguir sus pasiones y perder el miedo.
“Para alentar a más niñas a participar en STEM, creo que es esencial crear un entorno que fomente la curiosidad y el juego en torno a la ciencia y la tecnología. Programas educativos, charlas de modelos a seguir en STEM, desafíos y competiciones pueden ser herramientas efectivas para estimular el interés y la creatividad desde una edad temprana”, explicó.
Para celebrar y promover el Día Internacional de las niñas en las TIC este año, Sandra planea participar en eventos y actividades que promuevan la participación de las niñas en STEM y tecnología, como talleres, charlas inspiradoras o mentorías.
Por su parte, María Renée Iriarte, quien obtuvo becas completas para estudiar en Princeton y Harvard, demostró desde muy pequeña una curiosidad insaciable por el mundo que la rodeaba, especialmente por la tecnología y las ciencias. Su interés se remonta a su infancia, cuando seguía a su padre, un hombre ingenioso, en sus arreglos y exploraciones tecnológicas. Fue en su adolescencia cuando ingresó a un colegio prestigioso y se sumergió en las ciencias tecnológicas, lo que la llevó a enamorarse cada vez más de las ciencias exactas y a participar en desafíos como las olimpiadas científicas.
Uno de los momentos más significativos para María Renée en el campo de las TIC fue su participación en las olimpiadas científicas y su posterior victoria en el National Youth Science Camp. A pesar de los desafíos y las dudas iniciales, María Renée perseveró, enfrentó sus miedos y alcanzó el éxito, lo que la llevó a cambiar su perspectiva y a descubrir nuevas pasiones.
En cuanto a la representación de las mujeres en el sector tecnológico, María Renée celebra el progreso realizado hasta ahora, pero reconoce que aún quedan desafíos por superar en términos de igualdad de oportunidades y eliminación de restricciones basadas en el género. Sueña con un futuro donde todas las mujeres puedan perseguir sus pasiones y alcanzar su máximo potencial sin restricciones ni prejuicios.
“Me inspira mucho ver que en el mundo hay más mujeres en el sector de la tecnología. Con mis experiencias vividas, estoy segura de que en el mundo sí hubo un cambio significativo. Las mujeres somos fuertes y capaces. Las jóvenes, niñas y mujeres interesadas en la tecnología son mujeres valientes. El simple hecho de saber que ahora somos más vistas y apoyadas me pone feliz. A todas las mujeres del mundo, gracias por mantenerse fuertes”.
Para Colomba, fue el encuentro con su mentora a los 11 años lo que encendió verdaderamente su pasión por las TIC. Esta relación significativa le brindó el apoyo y la guía necesarios para explorar más profundamente el fascinante mundo de la tecnología.
Uno de los momentos más desafiantes y emocionantes en su viaje en el campo de las TIC ocurrió a los 12 años, cuando participó en una competencia de programación. Aunque experimentó nerviosismo y miedo, esta experiencia le enseñó una valiosa lección: que ningún proyecto debe ser perfecto, sino único, y que cada paso hacia adelante es un logro en sí mismo.
Para alentar a más niñas a participar en STEM y tecnología desde una edad temprana, Colomba enfatiza la importancia del apoyo tanto en el hogar como en la escuela. Cree que los colegios deben incentivar a las niñas en estas áreas y que el respaldo de la familia, amigos y mentores es crucial para cultivar el interés y la confianza de las jóvenes en la tecnología.
Para Camila, la tecnología no es solo una industria, es un mundo maravilloso lleno de posibilidades infinitas. Su interés por este campo fue influenciado por el ambiente tecnológico en el que creció, gracias a la profesión de su padre como ingeniero de sistemas. A medida que crecía, su fascinación por la tecnología solo aumentaba, encantada por las oportunidades que ofrecía.
Camila destaca su participación en la Women Game Jam, donde trabajó en equipo con sus amigas. Esta experiencia le demostró el poder del trabajo colaborativo y la creatividad en el mundo de la tecnología. El apoyo de mentoras y comunidades juega un papel crucial en el desarrollo de la confianza de las niñas en TIC, según Camila. Estas figuras proporcionan el impulso necesario para que las niñas se aventuren en desafíos y persigan sus metas en el campo de la tecnología.
FORMACIÓN
Los programas dirigidos a niñas y jóvenes están desempeñando un papel crucial en la promoción de la diversidad y la igualdad de género en el campo de la tecnología. Desde Technovation Girls hasta iniciativas como Unicodemy, Chicas Waskiris, Me Gusta la Ciencia, Talenty del TECBA, Py Ladies, TechGirls de la embajada de USA y los concursos Steam de la Fundación Patiño, cada uno ofrece oportunidades únicas para que las jóvenes exploren su pasión por la tecnología, desarrollen habilidades y se empoderen para convertirse en líderes del futuro.