El servicio de buses interdepartamental en las rutas La Paz- Cochabamba y Oruro - Cochabamba fue restablecido, luego que la Policía con apoyo de las Fuerzas Armadas desbloqueara el puente en Parotani, uno de los puntos más conflictivo del bloqueo evista que lleva 20 días.
La Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) informó del restablecimiento del servicio de transporte interdepartamental en esta ruta.
"Como resultado de las acciones de desbloqueo en Parotani, la ATT informó a la población que la salida de buses en la ruta Oruro - Cochabamba fue restablecida", al igual que en el trayecto entre La Paz y Cochabamba, según comunicado del ente regulador.
Un operativo policial con apoyo militar consolidó el viernes el control y la transitabilidad por el puente en Parotani, uno de los puntos más conflictivos del bloqueo evista en la vía de conexión de Cochabamba al occidente de Bolivia.
En el marco del operativo "Tarifa controlada, Economía asegurada", la ATT desplazó personal en las terminales de buses para supervisar el cumplimiento de horario de salida y controlar que las tarifas no superen los precios máximos establecidos.
La ATT informó que para cualquier consulta o reporte, los usuarios pueden contactarse a la línea gratuita 800-10-6000 o al whatsApp 715 33208.
En Bolivia, como en otros países de fuerte tradición católica, la doble identidad que con los años ha ido adquiriendo la fiesta de Todos los Santos o Halloween, según la versión con la que uno se sienta más identificado o menos indiferente, llega acompañada de una polémica sobre la que vale la pena reflexionar.
JORGE PATIÑO SARCINELLI
La libertad de expresión de la que gozamos en Bolivia es, por darle un calificativo, imperfecta. Entre políticos se dicen de todo, los columnistas podemos criticar casi sin restricciones, pero el Gobierno ejerce presión económica sobre los medios que cobijan la crítica. Como en Bolivia lo imperfecto es sinónimo de bueno, de eso no hay que quejarse.
La libertad de expresión de la que gozamos en Bolivia es, por darle un calificativo, imperfecta. Entre políticos se dicen de todo, los columnistas podemos criticar casi sin restricciones, pero el Gobierno ejerce presión económica sobre los medios que cobijan la crítica. Como en Bolivia lo imperfecto es sinónimo de bueno, de eso no hay que quejarse.
IGNACIO VERA DE RADA
La salida de Fernando Savater de El País suscitó reacciones de dos tipos: desde airadas protestas (generalmente de personas alineadas con las derechas) hasta estruendosas ovaciones (generalmente de personas alineadas con las izquierdas). Estas reacciones, creo yo, justifican un análisis de lo que supone la salida de aquel medio, de uno de los escritores y filósofos españoles de más peso en las últimas décadas.
La salida de Fernando Savater de El País suscitó reacciones de dos tipos: desde airadas protestas (generalmente de personas alineadas con las derechas) hasta estruendosas ovaciones (generalmente de personas alineadas con las izquierdas). Estas reacciones, creo yo, justifican un análisis de lo que supone la salida de aquel medio, de uno de los escritores y filósofos españoles de más peso en las últimas décadas.
Para abordar la presente columna, en principio, de manera muy breve y general, veremos qué entendemos hoy por socialismo. Luego, con esa aproximación conceptual, identificaremos a los gobiernos que, en el inicio del presente siglo, emergen en latinoamérica en la primavera política socialista.
Para abordar la presente columna, en principio, de manera muy breve y general, veremos qué entendemos hoy por socialismo. Luego, con esa aproximación conceptual, identificaremos a los gobiernos que, en el inicio del presente siglo, emergen en latinoamérica en la primavera política socialista.
El proceso constituyente que elaboró la actual Constitución boliviana concluyó con el referéndum aprobatorio de fecha 25 de enero de 2009, y su promulgación el 7 de febrero del mismo año. Fue un proceso político traumático, complejo y violento, y que, contra todo pronóstico y previsión legal y administrativa, duró tres años.
El proceso constituyente que elaboró la actual Constitución boliviana concluyó con el referéndum aprobatorio de fecha 25 de enero de 2009, y su promulgación el 7 de febrero del mismo año. Fue un proceso político traumático, complejo y violento, y que, contra todo pronóstico y previsión legal y administrativa, duró tres años.