“Nunca vi un proceso electoral con tantas trabas y sin seguridad jurídica”. Con estas palabras, el vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Vargas, de Bolivia, describía el pasado martes el caos que rodea las elecciones judiciales previstas para fin de año. Estos comicios estaban originalmente programados para 2023 pensando en que el relevo de autoridades judiciales ocurriera el primer día de 2024.
Puedo decir: “volver a las minas, después de vivir un siglo, es como descifrar signos sin ser sabio competente”. O también puedo decir: “ay, país, país, país”. Es todo tan inmenso, tan inconmensurable; tan infinito y al mismo tiempo tan incomprensible. Al inicio del mes estaba en el norte con su selva y ríos caudalosos. Este 28 de agosto, camino por el páramo, piso el barro ácido de la copajira. La vista se pierde en el horizonte quemado por el sol.
Puedo decir: “volver a las minas, después de vivir un siglo, es como descifrar signos sin ser sabio competente”. O también puedo decir: “ay, país, país, país”. Es todo tan inmenso, tan inconmensurable; tan infinito y al mismo tiempo tan incomprensible. Al inicio del mes estaba en el norte con su selva y ríos caudalosos. Este 28 de agosto, camino por el páramo, piso el barro ácido de la copajira. La vista se pierde en el horizonte quemado por el sol.
GABRIELA CANEDO VÁSQUEZ
El 12 de marzo de 1930, Mahatma Gandhi, apoyado en un bastón de bambú, salió de su monasterio hinduista para recorrer a pie más de 300 kilómetros y llegar después de casi un mes, a la costa del mar Arábico el 6 de abril. Allí, agarró un puñado de arena rica en sal, lo levantó haciendo la señal de triunfo y pronunció las famosas palabras: “Con este sencillo acto sacudo los cimientos del imperio británico”.
El 12 de marzo de 1930, Mahatma Gandhi, apoyado en un bastón de bambú, salió de su monasterio hinduista para recorrer a pie más de 300 kilómetros y llegar después de casi un mes, a la costa del mar Arábico el 6 de abril. Allí, agarró un puñado de arena rica en sal, lo levantó haciendo la señal de triunfo y pronunció las famosas palabras: “Con este sencillo acto sacudo los cimientos del imperio británico”.
WALTER GUEVARA ANAYA
Una vez descartadas las primarias, el único filtro que queda para eliminar a la horda de precandidatos inconsecuentes es la primera vuelta. Varias declaraciones de Manfred Reyes Villa dejan pensar que este es su escenario favorito.
Sin embargo, cualquier opositor tendrá que enfrentar tres difíciles obstáculos. Los he descrito en media docena de artículos:
Una vez descartadas las primarias, el único filtro que queda para eliminar a la horda de precandidatos inconsecuentes es la primera vuelta. Varias declaraciones de Manfred Reyes Villa dejan pensar que este es su escenario favorito.
Sin embargo, cualquier opositor tendrá que enfrentar tres difíciles obstáculos. Los he descrito en media docena de artículos:
“Bolivia se nos muere”. Esa frase, que Víctor Paz Estenssoro pronunció el 29 de agosto de 1985, para justificar la promulgación del Decreto Supremo 21060, ha pasado a la historia de Bolivia como una de las más icónicas, puesto que reflejaba la realidad de su tiempo.
“Bolivia se nos muere”. Esa frase, que Víctor Paz Estenssoro pronunció el 29 de agosto de 1985, para justificar la promulgación del Decreto Supremo 21060, ha pasado a la historia de Bolivia como una de las más icónicas, puesto que reflejaba la realidad de su tiempo.