El director departamental del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), Franz Lavayén, informó ayer que el predio en conflicto en Incachaca está en proceso de saneamiento y tiene una “medida precautoria de desalojo” pendiente, misma que no se pudo ejecutar por la falta de resguardo policial.
La aclaración se da a una semana de la denuncia pública que hizo un grupo de comunarios de la zona por la toma violenta de tierras productivas y una granja.
Lavayén explicó que el terreno en disputa está ubicado en el Sindicato Agrario Paracti y presenta líos porque se encuentra en el polígono de Incachaca, que es el límite entre los municipios de Colomi y Villa Tunari.
Explicó que la familia Orihuela y la comunidad de Campo Verde pugnan por el derecho propietario. Asimismo, aclaró que existen sobreposiciones con otros predios de la Asociación de Yerba Materos y de una cooperativa denominada Suticollo.
“Estos predios están en saneamiento, ya hemos hecho la intervención con el relevamiento, con las mensuras en campo, se han medido para todas las partes, pero las carpetas se están trabando por la gran cantidad de denuncias que se presentan por el incumplimiento de las medidas precautorias”, subrayó.
El director departamental del INRA añadió que identificaron asentamientos y construcciones ilegales en inspecciones realizadas al lugar, pero a la fecha no se hizo el desalojo porque la Policía aún no dispuso personal para la intervención.