Los pacientes renales que reciben atención en el hospital Viedma se declararon ayer en emergencia por la falta de insumos.
La administración del establecimiento de tercer nivel informó que se analizan soluciones para cubrir las necesidades de los enfermos.
El representante nacional de los enfermos renales, José Alcocer, mencionó que la carencia de “catéteres permanentes” agrava el sufrimiento de los pacientes con insuficiencia renal. El costo de cada catéter supera los 7 mil bolivianos, según especialistas.
Asimismo, comentó que varios enfermos también lidian con la falta de medicamentos, una situación se que prevé superar en los próximos días.
Alcocer detalló que en Cochabamba existen 1.232 enfermos renales, de los que un gran porcentaje dializa en el hospital Viedma, mientras que el resto se atiende en al menos 10 centros privados.
Ante esta situación, la directora del hospital Viedma, Adela Amaya, dijo que la carencia de insumos se debe a la coyuntura económica que atraviesa el país por la falta de dólares, pero indicó que realizan gestiones para en un mes subsanar este problema.
Respecto a los medicamentos, sostuvo que en dos días máximo llegará un lote.
Amaya explicó que se cumplen procedimientos administrativos para adquirir los remedios, pero las empresas importadoras de fármacos no se presentan porque los precios referenciales no cubren los gastos que erogan.
