El alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, afirmó ayer que “es complicado” subir los pasajes del transporte público porque eso afectaría duramente la situación económica de la población, por lo que pidió más “tiempo y sacrificio” a los choferes.
La Federación del Autotransporte de Cochabamba convocó a un paro de 24 horas para mañana martes exigiendo que se analice el incremento de pasajes.
“Entiendo la situación de los hermanos transportistas, obviamente que también tiene el derecho, porque han subido los repuestos, sube todo pero no el pasaje. Pero en esta oportunidad es bien complicado elevar el precio de las tarifas por la situación económica que está atravesando el país”, dijo Reyes Villa tras la inauguración de obras de aducción de agua potable para los barrios de Santa Vera Cruz.
El transporte presentó un estudio que señala que el pasaje urbano debería subir a 2,67 bolivianos (2,70 redondeado), mientras que la Alcaldía sostiene que la tarifa máxima tendría que ser 2,17 (2,20 redondeado), según una investigación realizada por el Comité de Transporte.
Reyes Villa afirmó que no es momento de medidas de presión ni de subir la tarifa y ofreció bajar impuestos como una manera de evitar este incremento.
“Lo que se tiene que consolidar el pasaje de 2 bolivianos, porque lo oficial es 1,90, y llegado el momento de que mejore la situación económica ahí vamos a poder hablar de elevar los pasajes”, dijo.
“Según el estudio que se ha hecho, viene a costar más o menos 2,17, que eso no se va a dar, entonces se subiría a 2,20 y tampoco se va a dar porque seguramente van a decir que no hay cambio entonces van a decir 2,30 o 2,50”, dijo.
Pidió “a los hermanos transportistas un poco más de tiempo y sacrificio, que van a ver que va a llegar el momento que vamos a elevar “, señaló, a tiempo de convocar al diálogo al sector antes del paro de transporte.