El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, informó sobre el reciente comportamiento del índice de riesgo país para Bolivia, según el último reporte elaborado por JP Morgan. Al 19 de julio de 2024, Bolivia registró un índice de 2.100 puntos, manteniéndose como el país con el mayor riesgo en el continente americano, solo superado por Venezuela. Este valor representa un incremento del 0,5% respecto a la última actualización.
Según Romero, el impacto de la revuelta militar del 26 de junio de 2024 en la sede de gobierno se reflejó rápidamente en el índice de riesgo país. En esa fecha, el índice era de 1.980 puntos, pero al día siguiente subió a 2.027 puntos y cerró la semana (28 de junio) en 2.082 puntos, evidenciando un aumento del 5%.
Comparando el dato actual con el del 25 de julio de 2023, el aumento ha sido del 129%. Aunque el 2 de enero de 2024 el índice comenzó en 2.233 puntos con una tendencia a la baja, los eventos políticos recientes han revertido esta tendencia, llevándola al alza.
Romero destacó que este incremento no es una señal positiva para el país. Un índice de riesgo país elevado desalienta la inversión y el empresariado privado, y también ahuyenta la llegada de capitales extranjeros. En el caso de que se logren obtener préstamos o inversiones, estos vendrán acompañados de mayores costos para compensar el riesgo, superando un 20% de rentabilidad exigida.
El panorama económico de Bolivia se complica aún más con una crisis fiscal no resuelta, medidas paliativas insuficientes para abordar la escasez de dólares, y un tipo de cambio informal que ya supera los Bs. 11 en algunas regiones del país. Estos factores generan una mayor presión inflacionaria, con una inflación acumulada del 2,49% al primer semestre, una devaluación de la moneda en un 50% respecto al tipo de cambio paralelo, y una disminución del poder adquisitivo.
Romero advirtió que, bajo estas condiciones, el índice de riesgo país tiene altas probabilidades de seguir incrementándose, lo cual plantea un desafío significativo para la economía boliviana y su estabilidad a largo plazo.
El riesgo país sirve como un indicador de la tasa de interés que Bolivia tendría que pagar al obtener crédito internacional mediante la emisión de bonos soberanos. Este índice se emplea para evaluar la capacidad de un país para cumplir con sus obligaciones financieras y pagar su deuda.