Las autoridades municipales y las organizaciones sociales del municipio de Colomi, en Cochabamba, mantienen los puntos de bloqueo que instalaron la madrugada del miércoles pasado en la carretera nueva a Santa Cruz. De acuerdo con el diputado por el MAS, Grobert Nogales, aguardan la presencia de autoridades nacionales para tratar la actualización del mapa cartográfico.
“Nuestro alcalde, concejales y todas las organizaciones sociales están esperando la predispocion de las autoridades nacionales para buscar una solución a las observaciones que tienen sobre el mapa cartográfico de referencia para el Censo de 2024. No solo es Colomi el que tiene este problema, sino también otros municipios”, sostuvo Nogales.
Asimismo, el parlamentario aseguró que ninguna autoridad bajó a Colomi para dialogar con dirigentes y autoridades municipales. Por otra parte, insistió que los datos del Censo de Población y Vivienda serán tomados en cuenta para la distribución de recursos económicos y escaños, lo que afectará a Colomi si van con el actualizado mapa referencial cartográfico.
Mientras el ejecutivo de la Federación de Trabajadores Campesinos de Colomi, Ever Guarachi, indicó que el bloqueo continua de manera indefinida y al mismo tiempo llamó a las autoridades nacionales a un diálogo sincero.
En los últimos días, Bolivia se ha declarado en alerta epidemiológica, frente al sarampión, una enfermedad de la que no se tenían casos desde 2000. Incluso, en 2012, el país había sido declarado libre de este mal por la OMS. Sin embargo, cuatro casos han vuelto a sonar las alarmas en el país. El primero en enero de este año, en la fronteriza población de Bermejo (Tarija). Y los otros cuatro, en la última semana: tres en Oruro y el ultimo en Tapacarí (Cochabamba).
JORGE PATIÑO SARCINELLI
Acepto la tesis de que “madre hay una sola” —la evidencia empírica es abrumadora—, pero cuestiono las reducciones de nuestra diversidad a una bipolaridad. Quizá explique mi resistencia el espíritu de la zorra; la de la metáfora griega “la zorra sabe muchas cosas, el erizo sabe una sola gran cosa”, cuyo sentido no es que la zorra lo sepa todo, sino que para ella la realidad admite mil lecturas.
Acepto la tesis de que “madre hay una sola” —la evidencia empírica es abrumadora—, pero cuestiono las reducciones de nuestra diversidad a una bipolaridad. Quizá explique mi resistencia el espíritu de la zorra; la de la metáfora griega “la zorra sabe muchas cosas, el erizo sabe una sola gran cosa”, cuyo sentido no es que la zorra lo sepa todo, sino que para ella la realidad admite mil lecturas.
Fui madre por primera vez en el Hospital San Juan de Dios de Tarija (HSJD) en 1977, a sugerencia de mi obstetra quien aseguró que era la mejor opción por encima de las clínicas privadas. Buena sugerencia la suya y acertada decisión la nuestra. La atención fue satisfactoria como lo anticiparon el orden y la limpieza de sus austeras instalaciones y la amabilidad de todo su personal. Era tiempo de centralismo secante.
Fui madre por primera vez en el Hospital San Juan de Dios de Tarija (HSJD) en 1977, a sugerencia de mi obstetra quien aseguró que era la mejor opción por encima de las clínicas privadas. Buena sugerencia la suya y acertada decisión la nuestra. La atención fue satisfactoria como lo anticiparon el orden y la limpieza de sus austeras instalaciones y la amabilidad de todo su personal. Era tiempo de centralismo secante.
GONZALO MENDIETA ROMERO
Como buen presidente de centroderecha, Sebastián Piñera fue visto a menos por la izquierda. Piñera era un empresario más que un intelectual, pese a su PhD en Economía, y eso también marcó el juicio sobre su personalidad política. Piñera no tenía gran sentido del humor, pero en su afán de caer bien tal vez lograba lo opuesto —dice el sociólogo Eugenio Tironi—, como ocurría con las “Piñericosas”, el símil chileno de las Evadas, unas atribuidas, otras reales.
Como buen presidente de centroderecha, Sebastián Piñera fue visto a menos por la izquierda. Piñera era un empresario más que un intelectual, pese a su PhD en Economía, y eso también marcó el juicio sobre su personalidad política. Piñera no tenía gran sentido del humor, pero en su afán de caer bien tal vez lograba lo opuesto —dice el sociólogo Eugenio Tironi—, como ocurría con las “Piñericosas”, el símil chileno de las Evadas, unas atribuidas, otras reales.
Los balances políticos tratan siempre de interpretar los resultados que producen las decisiones adoptadas estratégicamente. Por ello, el balance, debe identificar réditos, ganancias y pérdidas. Veamos, entonces, en ese marco, el balance del último bloqueo de caminos que protagonizo Evo Morales y que mantuvo en vilo al país durante 16 días.
Los balances políticos tratan siempre de interpretar los resultados que producen las decisiones adoptadas estratégicamente. Por ello, el balance, debe identificar réditos, ganancias y pérdidas. Veamos, entonces, en ese marco, el balance del último bloqueo de caminos que protagonizo Evo Morales y que mantuvo en vilo al país durante 16 días.