El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, afirmó este viernes que no hay ninguna decisión tomada respecto al control de dólares a los exportadores y pidió al sector agroindustrial que asista al diálogo de esta tarde.
“No hay ninguna decisión tomada al respecto, justamente hay cuarto intermedio y consideramos que ese es el espacio que hay que utilizar para dialogar”, señaló el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, sobre la propuesta del control de divisas al sector exportador planteado por el “gabinete social”.
La autoridad se refirió a este tema previo a la reanudación del Diálogo Nacional por la Economía y la Producción que está previsto para las 16:00, de este viernes en la Casa Grande del Pueblo, en La Paz, donde autoridades de Gobierno y dirigentes de los empresarios privados analizarán las posibles soluciones a la coyuntura económica que atraviesa el país, según el reporte de Unitel.
El ministro también señaló que el diálogo está abierto a todos y que el país debe nutrirse de ideas y sugerencias. Dijo que la propuesta de control de divisas no fue presentada por el Gobierno.
Más temprano, el viceministro de Coordinación Gubernamental, Gustavo Torrico, manifestó que el control de divisas no está en los planes del Órgano Ejecutivo.
Montenegro también se refirió al anuncio lanzado por la dirigencia de la Cámara de Industria Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), en la mañana, sobre que no tomará parte de la reanudación del diálogo nacional. Dijo que espera que la entidad cruceña pueda tomar parte de la mesa que estará encabezada por el presidente Luis Arce.
“Consideramos que este espacio no debe ser desaprovechado, los invitamos a que se hagan presentes en la reunión porque esa es la forma en que los bolivianos siempre hemos solucionado los problemas en un ámbito democrático, pero también para poder expresar nuestros disensos, nuestras ideas de manera abierta, y el presidente (Arce) está en esa lógica”, expresó el ministro.
El máximo ejecutivo de Cainco, Jean Pierre Antelo, consideró que “el desarrollo de la reunión del pasado miércoles nos generó una profunda preocupación, dado que el Gobierno tiene una lectura alejada de la realidad económica de las empresas, trabajadores y de la sociedad en su conjunto