El presidente chileno, Gabriel Boric, apeló este sábado a la unidad en medio de la conmoción por el asesinato de tres policías del cuerpo militarizado de Carabineros y dijo que, para enfrentar esta situación, "no tienen que haber ni izquierdas ni derechas, ni oficialismo ni oposición".
"Tiene que estar Chile entero como un solo puño, entero como una sola fuerza para hacer justicia, para que no haya impunidad, para desbaratar estas bandas y para que paguen por sus crímenes, estén donde estén", recalcó el mandatario desde el responso fúnebre a los tres agentes fallecidos.
El mandatario, que se trasladó al lugar de los hechos, a la zona centro-sur del país, en la región del Bio Bío, a más de 600 kilómetros al sur de la capital, "no descartó ninguna herramienta legal" en este convulso escenario, pero subrayó que el Gobierno actuará "con la cabeza fría" y en coordinación con los poderes del Estado para "tener verdad, justicia y que no haya impunidad".
"En esto, todos somos necesarios, lo es también el general Yañez", señaló en un mensaje claro dirigido al director de Carabineros, quien en las últimas semanas ha recibido presiones de buena parte del oficialismo para dar un paso al costado luego de que la Fiscalía solicitara su imputación por presunta responsabilidad en las violaciones a los derechos humanos cometidas durante las multitudinarias protestas de 2019.
El ataque contra los tres funcionarios de Control de Orden Público (COP) de la comisaría de Los Álamos tuvo lugar en la localidad de Cañete sobre la 1:30 hora local (6:30 GMT), cuando un grupo de hombres armados se abalanzó contra su vehículo policial e incendió el vehículo, donde murieron calcinados un sargento y dos cabos.
El triple asesinato, inédito en el pasado reciente de Chile, coincidió justo el día en que el país conmemora el Día del Carabinero –el 27 de abril– a propósito de su 97º aniversario institucional. Todos los actos previstos para la jornada fueron suspendidos y el presidente declaró tres días de duelo nacional.
La Araucanía y parte de la región del Bio Bío, incluida la zona donde se perpetró el ataque, está bajo estado de emergencia desde mayo de 2022 en un intento por controlar los ataques, en su mayoría sabotajes incendiarios, de los grupos armados.
En la zona centro-sur de Chile hay un escenario de conflicto entre los pueblos originarios, el Estado y los grandes empresarios latifundistas y forestales que explotan tierras y bosques considerados ancestrales por las comunidades indígenas.