Muchos ucranianos, incluido el presidente del país, Volodímir Zelenski, están indignados por la asistencia del secretario general de la ONU, António Guterres, a la cumbre de los BRICS en la ciudad rusa de Kazán, pues consideran que ayuda a "normalizar" la invasión y solo daña a la organización.
El jefe de Estado recordó este jueves que el Día de las Naciones Unidas se celebra hoy "en todo el mundo, y "no en Kazán", donde las advertencias contra una escalada bélica coinciden con el paso cerca de la ciudad rusa de soldados norcoreanos de camino de la línea del frente, donde lucharán del lado de Rusia.
La Plataforma de Crimea y la Cumbre por la Paz hacen más por una paz justa y defender la Carta de la ONU que "el Consejo de Seguridad de la ONU o los funcionarios de la ONU", subrayó Zelenski en un discurso por vídeo ante la Cumbre Parlamentaria de la Plataforma de Crimea en Letonia, aunque sin mencionar directamente a Guterres.
Un golpe a la ONU
La decisión de ir a Rusia contrasta con la negativa de Guterres a asistir a la Primera Cumbre Mundial por la Paz en Suiza, en la que estaban representados unos 100 países, según recalcó también anteriormente el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania.
"Se trata de una elección equivocada que no hace avanzar la causa de la paz. Sólo daña la reputación de la ONU", comentó en X.
Esta será la primera vez que Guterres y el presidente ruso, Vladímir Putin, se verán en más de dos años.
Un portavoz adjunto de la ONU, Farhan Haq, recalcó que Guterres viajó a Kazán porque las naciones que integran los BRICS "representan casi la mitad de la humanidad" y, por ello, la cumbre "es de gran importancia para el trabajo de la ONU con los países miembros" de esa organización.
El portavoz dio por hecho que Guterres subrayará ante Putin "su postura bien conocida sobre la guerra en Ucrania y las condiciones para una paz justa basada en la carta fundacional de la ONU y las resoluciones", en referencia a la integridad territorial y la soberanía de Ucrania.
No obstante, Oleksandr Merezhko, jefe de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento y diputado del partido oficialista Servidor del Pueblo consideró en declaraciones de EFE que "acudir a un acto organizado por un criminal de guerra, con una orden de detención emitida a su nombre por la Corte Penal Internacional (CPI), está fuera de lugar".
La presencia de Guterres ayuda a Putin a "legitimar" su invasión de Ucrania y disminuir su aislamiento internacional, subrayó Merezhko.
"Creo que Guterres debería ser destituido de su cargo", dijo, y recalcó que, si el portugués quería que la ONU estuviera representada, podría haber enviado a Rusia a un funcionario de menor rango.
A su vez, Olenivka Community, una asociación de familiares de los prisioneros de guerra ucranianos recomendó al secretario general de la ONU que aproveche su viaje para visitar a los cautivos que Rusia mantiene "en el aislamiento y en una incertidumbre durante años".
Una cumbre intrascendente
Kiev ha aprovechado la declaración de la cumbre para insistir en que Rusia no ha logrado encontrar nuevos apoyos a su invasión entre los líderes de los BRICS, entre los que se encuentran los de Brasil, la India y China, Luiz Inácio Lula da Silva, Narendra Modi y Xi Jinping, respectivamente, que abogaron por negociaciones de paz, el diálogo y la pronta desescalada.
"La cumbre de los BRICS, que Rusia planeaba utilizar para dividir al mundo, ha demostrado una vez más que la mayoría mundial está con Ucrania en su intención de garantizar una paz amplia, justa y duradera basada en el respeto del derecho internacional y la Carta de la ONU", subrayó el Ministerio en un comentario público.
Según éste, la declaración final de la cumbre demuestra que los intentos de Moscú de presentar al llamado Sur Global como partidario de la agresión de Rusia contra Ucrania han fracasado.
Los líderes que asistieron a la Cumbre entienden la "toxicidad" de Putin y posiblemente fueron tentados a asistir por algunas promesas del líder ruso, sugirió Merezhko a EFE.
"El Foro de los BRICS se posiciona como una organización que se centra en cuestiones económicas, mientras que Putin quiere convertirlo en una coalición anti-occidental. Otros líderes asistentes comprenden su peligro", subrayó.
En la declaración final, aunque vagamente, han pedido a Rusia que se adhiera al derecho internacional, señaló el diputado.
"Incluso en la guarida del dictador, criticaron veladamente el régimen de Putin", dijo Merezhko.