El organizador del partido amistoso de fútbol entre una selección de Hong Kong y el Inter Miami anunció hoy que retirará la solicitud de una subvención gubernamental de 16 millones de dólares hongkoneses (2,04 millones de dólares estadounidenses, 1,8 millones de euros) tras la ausencia del argentino Lionel Messi en el encuentro.
Tatler Asia, la empresa organizadora del duelo, también retirará la emblemática marca 'M' que representa el megaevento, declaró en una rueda de prensa este lunes su presidente y consejero delegado, Michel Lamunière.
Sin embargo, no mencionó nada sobre el reembolso del dinero de las entradas a los aficionados, dejando en incertidumbre el destino de su inversión.
El partido de exhibición que enfrentó el domingo a la selección hongkonesa con el Inter de Miami, propiedad del exfutbolista inglés David Beckham, pretendía ser un espectáculo, pero se convirtió en un relato de desencanto generalizado, ya que la leyenda del fútbol argentino y la renombrada estrella uruguaya Luis Suárez no comparecieron sobre el terreno de juego.
Posteriormente, el entrenador del conjunto estadounidense, el argentino Gerardo "Tata" Martino, se disculpó ante los medios de comunicación locales y pidió comprensión a los hinchas, aludiendo al enorme riesgo físico que suponía alinear a Messi y Suárez.
Beckham, también presidente del club de Florida, fue blanco de abucheos y de la furia del público cuando, al terminar el encuentro, trató de agradecer a los cerca de 40.000 espectadores su "increíble apoyo" tras la primera victoria de este año por 4-1 sobre el combinado hongkonés.
Asimismo, el secretario de Cultura, Deportes y Turismo de la región semiautónoma, Kevin Yeung, se dirigió a los medios de comunicación para expresar su decepción, y declaró que "una de las condiciones clave de nuestro acuerdo de financiación era que Messi participara en el partido al menos 45 minutos, sujeto a consideraciones de aptitud física y seguridad”.
Por otro lado, Yeung señaló con el dedo al organizador y le exigió una explicación sobre el incidente y las circunstancias que rodearon a la ausencia de los jugadores en el terreno de juego, así como su conexión con el Inter Miami.
El funcionario afirmó que la empresa organizadora prometió antes del encuentro que el jugador saltaría al campo en la segunda parte, pero que no fue hasta 10 minutos antes del final del mismo cuando se confirmó que no podría hacerlo, debido a una lesión.
La Administración alegó que se propuso al organizador una serie de medidas correctoras, entre ellas pedir al astro argentino que diera explicaciones a los miles de aficionados en persona al término del amistoso y que recibiera el trofeo en nombre del equipo, pero, al parecer todas ellas resultaron finalmente infructuosas.
El Comité de Grandes Acontecimientos Deportivos asignó 15 millones de dólares hongkoneses (1.779.130 millones de euros, 1.917.661 millones de dólares) para el certamen, así como una subvención de 1 millón de dólares hongkoneses (127.385 dólares) destinados a la gestión del emplazamiento.
Además, el gobierno destacó que su responsabilidad en el evento no se limitaba al patrocinio económico, sino también a la coordinación de los esfuerzos de los departamentos implicados, el control de multitudes y la gestión de las instalaciones, y añadió que los responsables públicos dedicaron "mucho tiempo a esta labor por lo que podían comprender la decepción de los fans"
Las autoridades hongkonesas han asegurado que “tomarán medidas de seguimiento de acuerdo con los términos y condiciones establecidos con la empresa organizadora, entre las que se incluye la reducción del importe de la financiación”.