El joven cocalero Raúl Uría, detenido preventivamente desde 2022, reveló ante un juez que el Ministerio de Gobierno le ofreció su libertad en dos oportunidades a cambio de declararse culpable en un juicio abreviado. De lo contrario, podría pugnar una pena de 15 años de cárcel.
Uría, líder de la "Juventud Yungueña", fue detenido la madrugada del 15 de septiembre tras los conflictos por el cierre del mercado ilegal de coca. El Gobierno lo acusó de tráfico de armas y desde entonces permanece detenido en la cárcel de San Pedro.
"El Ministerio de Gobierno vino dos veces, el 17 de noviembre y el 24 de noviembre del 2023, a proponerme que mi única salida era el juicio abreviado. Yo no acepté. Por principio y moral, que mis padres me han enseñado, yo no puedo culparme o inculparme por un hecho que no he cometido", dijo Uría en audiencia virtual.
Esta mañana se desarrolló la audiencia virtual sobre la situación jurídica del joven cocalero, pero el juez Marco Antonio Amaru dictó la ampliación de su detención preventiva por otros 45 días.
El detenido dijo que no renunciará a su inocencia y espera que Dios haga justicia ante la grave violación a sus derechos humanos. Entre tanto, las investigaciones aún no arrojaron pruebas contundentes para reforzar la acusación.
"¿Dónde va a quedar el daño o perjuicio a mí y a mi familia, el daño económico? No sé mi madre de dónde habrá conseguido dinero porque aquí, en San Pedro, todo es plata. ¿Quién me va a reponer? El Ministerio me ha ofrecido trabajo, me ha ofrecido licencia de comercialización de coca, no he aceptado porque soy una persona con principios y con moral. Entonces, ¿qué me dijo al no aceptar? Que el ministro me iba a dar 15 años (de cárcel) si no aceptaba el juicio abreviado", denunció el cocalero.
