Wilstermann ahonda su crisis económica. Con el final de octubre serán seis meses de sueldos adeudados de esta temporada al equipo profesional, sin contar con sueldos impagos al cuerpo técnico y al plantel de apoyo al club.
“Tenemos compañeros que no tienen para comer, se acerca una semana para que sean seis meses de deuda. No encontramos solución, tenemos hijos, familia detrás. Necesitamos de la gente”, dijo Rodrigo Amaral, tras el empate (2-2) ante Nacional Potosí, el domingo.
La situación para los jugadores es muy complicada, ya que la anterior semana determinaron no ingresar en paro y presionar con no usar la indumentaria del club en los entrenamientos y viajes.
“Queríamos incomodar con lo de la ropa Puma, pero no sentimos nada. Si quiere tanto al club que lo ayuden porque se está yendo al caraj...”, aseguró Amaral.
A la crisis económica, se suma que, pese al esfuerzo del plantel, los resultados no son los esperados y poco a poco se alejan de la posibilidad de clasificar a una Copa para 2025. La esperanza de paliar la crisis económica es clasificar a un torneo, ya que con esos ingresos podrán pagar en parte la deuda con el actual plantel y algunas demandas urgentes.
Tras el empate ante Nacional, el Aviador está a nueve puntos del último puesto de clasificación.