La entrada más barata para poder ver el partido entre Ecuador y Bolivia, que se jugará en el estadio Monumental, de Guayaquil, el próximo 14 de noviembre (20:00 HB), tendrá un costo de 25 dólares o 173 bolivianos, según dio a conocer la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
De acuerdo a la publicación de la FEF los sectores norte y sur o curvas, tendrán un costo de 25 dólares, que al cambio oficial sería 173 bolivianos.
El costo de las entradas para los otros sectores son los siguientes: Para el sector este, es de 60 dólares o 415 bolivianos; mientras que, para el sector oeste es de 75 dólares o 519 bolivianos.
Las localidades más caras para el encuentro es la del sector del palco, que tiene un costo de 110 dólares o 761 bolivianos.
“¡Guayaquil, vamos a llenar el estadio!”, es el slogan que utiliza la FEF para incentivar a sus hinchas a que llenar el escenario deportivo que tiene una capacidad de 60.000 espectadores, para alentar a la Tri en el duelo ante la Verde.
Ecuador determinó cambiar la sede del partido de Quito a Guayaquil, con la finalidad de aprovechar la alta temperatura que existe en esa ciudad y sacar los tres puntos ante Bolivia, además de alistarse para lo que será posteriormente el choque frente a Colombia, en Brranquilla que tiene la misma temperatura.
Aunque los bolivianos vivimos la evolución de una crisis política que agrava la situación económica y no parece tener perspectivas de un desenlace rápido, el mundo está pendiente de la jornada final de las elecciones en EEUU, cuyo resultado es tan incierto como trascendental.
Así lo muestra la prensa internacional, reflejando el final de varios meses de una campaña electoral atípica, marcada por la desinformación, la agresividad del expresidente candidato y la división del electorado.
CARLOS HUGO MOLINA
“Si hoy fueran las elecciones, ¿por cuál candidato votaría usted…?”, es la frase ritual con la que se inician las encuestas. Si fuésemos sinceros y por la situación en la que nos encontramos, la pregunta no tendría respuesta porque formalmente no existen. Ni en el oficialismo ni en la oposición.
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El prefijo “pos” significa “después de algo”, como en los casos de posguerra, posgrado, posdata, etc., pero en la nueva forma en la que vivimos la palabra “posverdad” es tomada del inglés “post-trunt” en el sentido de “superación de algo”, no “después de algo”, así la palabra posindustrial no desconoce la vigencia de la industria, pero se entiende que esta ha sido “superada” por otro factor, el de ‘la tecnología’.
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En este artículo desglosaremos uno a uno los hechos coyunturales económicos del país, donde se puede identificar tres actores clave: dos internos y uno externo. El primero son los hechos y señales reales que ofrece el modelo económico generando una respuesta con cambios estructurales para generar sostenibilidad.
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IGNACIO VERA DE RADA
1946 fue solamente uno de los muchos años en que Bolivia sufrió convulsiones sociales y políticas con derramamiento de sangre de por medio. Lo interesante de analizar un hecho histórico como ese es ver cómo los reflejos o coletazos de la historia pueden configurar en el futuro escenarios relativamente iguales.
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