La falta de diésel provoca que los carros basureros de la Empresa Municipal de Servicio de Aseo (EMSA) no operen con normalidad y la basura comienza a acumularse en las calles.
EMSA cuenta con un cronograma de recojo de basura; sin embargo, por falta de combustible modificó los horarios de recolección de los residuos sólidos en algunos barrios.
El gerente de EMSA, Franz Knaudt, indicó ayer que sólo el 50 por ciento de los vehículos está trabajando.
“No hemos descuidado por completo la basura, seguimos trabajando, pero es importante aclarar que el 20 por ciento está en las filas de los surtidores. Una vez que termina de trabajar nuevamente retorna a las filas, algunos pasan la noche ahí”, indicó.
Knaudt pidió a los vecinos que no sacar sus bolsas de basura a las vías para evitar focos de contaminación en los contenedores y precisó que por día se recogen más de 700 toneladas de desechos.
La escasez de combustible no solo afecta a EMSA, sino también la Secretaría de Infraestructura. El secretario de Gobernabilidad, Gustavo Camargo, informó que de momento sólo se atienden los trabajos de emergencia por la falta de diésel, un problema que también está perjudicando la ejecución de obras.