El canciller alemán, Olaf Scholz, recibió este martes al emir de Catar, Tamim bin Hamad al Thani, en una reunión en la que se abordó el conflicto en Oriente Medio, donde el país del Golfo ejerce como mediador, y en la que los dos señalaron que hace falta "intensificar los esfuerzos diplomáticos".
Durante un almuerzo de trabajo en el palacio de Meseberg, la residencia de huéspedes del Gobierno federal situada en las afueras de Berlín, Scholz agradeció al emir sus intentos de mediación para lograr un alto el fuego en Gaza y la liberación de los rehenes israelíes capturados por Hamás, según informó un portavoz del Ejecutivo.
El canciller "expresó su esperanza de que la muerte del líder de Hamás Sinwar incremente las oportunidades del correspondiente acuerdo", agregó.
Los dos líderes trataron la situación en Oriente Próximo y Oriente Medio y ambos coincidieron en que "para una paz duradera" hace falta "intensificar los esfuerzos diplomáticos".
En particular, en lo que respecta a la relación entre Israel y los palestinos, los dos expresaron el convencimiento de que hace falta impulsar un proceso político que conduzca hacia una solución con dos estados.
Bin Hamad al Thani participó la semana pasada en la primera cumbre en Bruselas entre los líderes de la Unión Europea (UE) y los países del Consejo de Cooperación del Golfo.
Allí alertó de que la guerra en el Líbano está complicando la labor de mediación que su país, Estados Unidos y Egipto llevan a cabo entre Israel y Hamás para alcanzar un alto el fuego en Gaza y afirmó que en las últimas semanas los esfuerzos se están viendo "obstaculizados" y no hay ningún tipo de conversaciones.
Las negociaciones entre Israel y Hamás para un alto el fuego en Gaza están estancadas desde finales de agosto en medio de acusaciones cruzadas de dificultar su avance.
Además, el Ejército israelí mató la semana pasada al jefe de Hamás, Yahya Sinwar, durante un enfrentamiento en el sur de Gaza.
Después de reunirse con el presidente estadounidense, Joe Biden, Scholz expresó la esperanza de que la muerte de Sinwar sea una oportunidad de retomar la vía hacia un "proceso político creíble" que culmine en una solución con dos estados.