Indígenas del oriente de Bolivia afectados por los incendios forestales llegaron este lunes hasta Santa Cruz, la región más poblada y afectada por el fuego, después de una caminata de cinco días para exigir a las autoridades que respeten la vida de las comunidades, de la fauna y flora de su territorio.
"En primer lugar, la marcha es en defensa de la vida, de nuestra vida, también en defensa de esas otras vidas, de miles de millones de vidas que han sido matadas criminalmente por el fuego", afirmó a EFE Marcial Fabricano, un líder histórico de los indígenas de la Amazonía, oriente y chaco bolivianos.
"Lo lamentable y lo detestable que vivimos en una política de Estado que nunca hizo, nunca cumplió, nunca se interesó por la defensa de la vida de nadie", enfatizó el líder indígena.
La caminata indígena partió el jueves desde la población de Pailón, y recorrió 55 kilómetros hasta llegar este lunes a la ciudad de Santa Cruz, donde activistas recibieron a los manifestantes con alimentos y bebidas.
Los dirigentes de la marcha informaron también que los indígenas reclaman la abrogación de la Ley 741, que permite el desmonte de hectáreas de tierra, lo que consideran la destrucción de su territorio.
"Aunque año tras año tenemos que vivir esta crisis ambiental, nosotros nunca vamos a renunciar esta defensa", manifestó el líder Fabricano.
Los incendios forestales ya consumieron 3,8 millones de hectáreas desde junio y la región más afectada es Santa Cruz, donde el fuego sigue devorando bosques y áreas protegidas.
El Gobierno boliviano declaró hace dos semanas la "emergencia nacional" para facilitar la coordinación interna y la llegada de la ayuda internacional para combatir los incendios y también emitió una alerta sanitaria por la mala calidad del aire por el humo que llegó a varias ciudades.
Un avión cisterna Tanker Electra T481 y un helicóptero AirBus BK117 llegaron el sábado a Santa Cruz desde Canadá y Francia, respectivamente, para reforzar el combate contra los incendios forestales.
Ambientalistas bolivianos temen que este año la magnitud del desastre por los incendios forestales sean peores a los de 2019 cuando fueron consumidas por el fuego más de 5,3 millones de hectáreas de bosque y pastizales.