Los restos del fallecido cantante británico Liam Payne, fallecido el 16 de octubre en Buenos Aires, partieron ayer desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza con destino a Londres, según informaron a EFE fuentes oficiales.
El cuerpo del exintegrante del grupo musical One Direction partió de la capital argentina poco antes de las 14:00 hora local (17:00 GMT) en un vuelo de la aerolínea British Airways con destino a Río de Janeiro, desde donde continuará rumbo a Londres.
El padre del músico, Geoff Payne, llegó a Argentina dos días después de la muerte de su hijo para llevar el cuerpo a su país, algo que demoró unas tres semanas debido, entre otras cosas, a que la fiscalía debía concluir con los estudios toxicológicos e histopatológicos complementarios a la autopsia.
El cuerpo del artista había sido trasladado al Cementerio Británico de Buenos Aires para ser embalsamado con el fin de preservar los restos y así poder realizar un funeral en Londres previo a su entierro.
Con el avance de los trabajos de construcción de su Línea Amarilla, el Tren Metropolitana de Cochabamba está en vías de consolidarse como una opción conveniente para el transporte de pasajeros.
Tuvieron que vencerse muchas peripecias, todas resultantes de la oposición ciudadana, antes de que se defina el trazo de esa línea y se inicie su implementación, aunque con un alcance distinto del que tenía al principio pues no llegará hasta Sacaba.
Cuando pensamos en medicamentos, solemos enfocarnos en su eficacia y en su impacto en la salud, pero raramente consideramos el riguroso proceso que asegura su disponibilidad. En el pasado, los centros de distribución eran simples almacenes con capacidades limitadas y procedimientos menos avanzados.
Cuando pensamos en medicamentos, solemos enfocarnos en su eficacia y en su impacto en la salud, pero raramente consideramos el riguroso proceso que asegura su disponibilidad. En el pasado, los centros de distribución eran simples almacenes con capacidades limitadas y procedimientos menos avanzados.
CARLOS HUGO MOLINA
Desde el desarrollo territorial, el Censo no modifica las grandes líneas de la sociedad y la economía boliviana, los lugares en los que se generan excedentes ni los espacios que ejercen atracción migratoria de los bolivianos que buscan oportunidades. Hemos identificado esos lugares definidos por los bolivianos y los comparto con quienes ven la realidad sin la censura de las consignas y las mezquindades.
Desde el desarrollo territorial, el Censo no modifica las grandes líneas de la sociedad y la economía boliviana, los lugares en los que se generan excedentes ni los espacios que ejercen atracción migratoria de los bolivianos que buscan oportunidades. Hemos identificado esos lugares definidos por los bolivianos y los comparto con quienes ven la realidad sin la censura de las consignas y las mezquindades.
Y al final, todo sigue igual. El presidente Luis Arce utilizó casi una hora y 15 minutos de televisión en el horario “prime time” sólo para reiterar que la culpa de los problemas económicos no es suya y enumerar, nuevamente, las “soluciones estructurales” que permitirán resolver los problemas, si bien nos va, en 2026. Dicho de otro modo, hay que ajustarse los cinturones porque lo que viene puede ser peor.
Y al final, todo sigue igual. El presidente Luis Arce utilizó casi una hora y 15 minutos de televisión en el horario “prime time” sólo para reiterar que la culpa de los problemas económicos no es suya y enumerar, nuevamente, las “soluciones estructurales” que permitirán resolver los problemas, si bien nos va, en 2026. Dicho de otro modo, hay que ajustarse los cinturones porque lo que viene puede ser peor.
RÓGER CORTEZ HURTADO
El tiempo de la queja, la denuncia y las lamentaciones ha vencido. La siniestra masa de humo y hollín, pesada como garra de plomo, que se cubre los cielos de Bolivia, Paraguay, parte del Brasil y avanza sobre la Argentina, no deja espacio a las dudas.
El tiempo de la queja, la denuncia y las lamentaciones ha vencido. La siniestra masa de humo y hollín, pesada como garra de plomo, que se cubre los cielos de Bolivia, Paraguay, parte del Brasil y avanza sobre la Argentina, no deja espacio a las dudas.