Desde Mercator Bolivia, firma que representa a la naviera internacional Ocean Network Express (ONE), señalaron que no suspendieron la recepción de pagos en Bolivia para las cargas de importación y exportación, aclaración que se da después de un reporte estatal en los que se citó a esta firma para hacer alusión a esta medida, la cual sí están aplicando otras navieras.
“Las circunstancias hoy en día están obligando a las navieras a tomar determinaciones diferentes al fin de poder seguir operando en el país. Para las demás navieras ha sido un problema, nos incluimos, pero, en el caso particular de nuestra empresa, seguimos operando de forma normal con nuestros clientes de importación y de exportación, y estamos recibiendo todavía pagos en Bolivia”, sostuvo Eliana Cabrera, gerente general de Mercator Bolivia.
Cabrera ratificó que no han cambiado ninguna de las condiciones de su operación en Bolivia y no hay ninguna comunicación oficial desde la oficina central de ONE, que tiene en base en Singapur.
Asimismo, sostuvo que actualmente ONE está operando en los puertos de Arica, donde manejan entre el 12% y 15% de la carga boliviana, así como también en las terminales de Iquique, donde se encargan del 36% de la carga.
“Estamos desde hace seis años en el país, pero la empresa tiene una trayectoria internacional de más de 100 años. Nuestra empresa lo que hace es trabajar mucho por Asia especialmente, pero tenemos tráfico a nivel mundial, operando con todos los mercados”, concluyó Cabrera.
Mirada del sector privado
Después de que se difundiera que otras firmas navieras que transportan carga boliviana -que sale e ingresa al país a través de puertos de Perú y Chile- suspenderán la recepción de pagos en territorio nacional, desde la Cámara de Exportadores, Logística y Promoción de Inversiones de Santa Cruz (Cadex) observan que esta situación puede aumentar los costos de exportación y no es una buena señal para el sector.
Así lo reflejó el gerente técnico de la entidad empresarial, Rafael Riva, al advertir la coyuntura económica del país, donde la diferencia cambiaria y también a las comisiones que las empresas tienen que pagar para poder hacer transferencias fuera del país.
No obstante, el ejecutivo aclaró que esta situación no implica que las navieras vayan a dejar de prestar servicios en Bolivia, sino que el cambio que está habiendo es por el tema del pago y el lugar donde se debe hacer el pago.
Además, sostuvo que no se puede generalizar la situación, ya que en el comercio exterior hay distintas modalidades de contratación en función a dónde y hasta dónde la empresa vendedora o exportadora está corriendo con los costos, es decir, hay empresas que sólo corren con los costos en fábrica, hay otras que hacen lo propio hasta puerto de origen y otras en puertos de destino.