Una imparable Colombia, con goles de Jhon Córdoba, James Rodríguez de penalti, Luis Díaz, Richard Ríos y Miguel Ángel Borja, también desde los 11 metros, goleó por 5-0 este sábado a Panamá y avanzó a las semifinales de la Copa América de Estados Unidos.
El State Farm de Glendale se rindió a James, el exjugador del Real Madrid, Bayern Múnich y Everton, que firmó dos asistencias en el encuentro, la quinta en lo que va del torneo, para el gol de Díaz.
En el desierto de Arizona, la selección que dirige Néstor Lorenzo, ratificó su papel de favorita y encadenó, además, 27 partidos invicta e igualó su mejor racha de siempre, los de la era de Francisco Maturana, hilvanados entre 1992 y 1994.
Colombia se enfrentará en semifinales, el 10 de julio en Charlotte, con el vencedor del pulso entre Uruguay y Brasil, que se juega este mismo sábado en Las Vegas. EFE
El reciente caso de violación sufrido por una niña de 10 años, a manos de su hermano de 15, sumado a otros en los que es patente la soledad de las involucradas propicia una reflexión acerca de las circunstancias intrafamiliares que suscitan esos dramas.
El ciudadano está cansado de escuchar sandeces acerca de la desagradable y sucia administración de justicia y de las descaradas tramoyas que se arman en vistas de la absurda elección de magistrados. El ciudadano, fuera de abominar el tecnicismo jurídico, cree erróneamente que el desastre judicial solo es de interés de los litigantes cuando en realidad nadie está libre de caer en las garras de la “justicia”.
El ciudadano está cansado de escuchar sandeces acerca de la desagradable y sucia administración de justicia y de las descaradas tramoyas que se arman en vistas de la absurda elección de magistrados. El ciudadano, fuera de abominar el tecnicismo jurídico, cree erróneamente que el desastre judicial solo es de interés de los litigantes cuando en realidad nadie está libre de caer en las garras de la “justicia”.
RÓGER CORTEZ HURTADO
El resultado verdaderamente decisivo de la votación del domingo 14 de diciembre es la consagración del colapso del Tribunal Supremo Electoral (TSE) o, más propiamente, del Órgano o poder electoral del país. Lo ocurrido prueba que la próxima elección nacional será definida por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), no por los electores, que determinará y sentenciará quienes serán los elegidos. El TSE será una figura ornamental para llenar formulismos.
El resultado verdaderamente decisivo de la votación del domingo 14 de diciembre es la consagración del colapso del Tribunal Supremo Electoral (TSE) o, más propiamente, del Órgano o poder electoral del país. Lo ocurrido prueba que la próxima elección nacional será definida por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), no por los electores, que determinará y sentenciará quienes serán los elegidos. El TSE será una figura ornamental para llenar formulismos.
Hace más de 20 años estudié la carrera de historia del arte teniendo claro que su campo laboral era estrecho y que posiblemente me esperaba una vida de privaciones, pero sabiendo al mismo tiempo que no existía otra cosa que me apasionara tanto en la vida como la historia.
Hace más de 20 años estudié la carrera de historia del arte teniendo claro que su campo laboral era estrecho y que posiblemente me esperaba una vida de privaciones, pero sabiendo al mismo tiempo que no existía otra cosa que me apasionara tanto en la vida como la historia.
GABRIELA CANEDO VÁSQUEZ
“Si Manuela viviera, con nosotras estuviera”, con ese lema, mujeres activistas reclaman la persecución judicial de la que se consideran ser objeto debido a un acto de protesta pacífico que llevaron a cabo en la colina de San Sebastián, en el monumento de las Heroínas de la Coronilla, allí donde Manuela Gandarillas junto a otras mujeres valientes, resistieron al ataque de Goyeneche.
“Si Manuela viviera, con nosotras estuviera”, con ese lema, mujeres activistas reclaman la persecución judicial de la que se consideran ser objeto debido a un acto de protesta pacífico que llevaron a cabo en la colina de San Sebastián, en el monumento de las Heroínas de la Coronilla, allí donde Manuela Gandarillas junto a otras mujeres valientes, resistieron al ataque de Goyeneche.