El título de este artículo corresponde a las declaraciones de un dirigente del municipio de San Julián, que sintetizaba de esta forma las reivindicaciones por las cuales estaban bloqueando la carretera Santa Cruz – Trinidad, “Queremos biotecnología y libre mercado”, afirmaba con contundencia. Este dirigente, que corresponde a un territorio y a un sector que durante alrededor de 20 años ha apoyado mayoritariamente los gobiernos del Movimiento Al Socialismo, marca con claridad el cambio de mentalidad que se está dando en los sectores populares de muchos rubros que reclaman un modelo económico que les asegure los dólares que necesitan para sus actividades productivas y económicas.
Resulta paradójico que después de dos décadas de propaganda oficialista “antiimperialista”, “anticolonialista”, “antineoliberal” y muchos antis que han estancado a Bolivia derrochando una gran oportunidad para nuestro desarrollo entre los años 2006 y 2019, hoy el conjunto del pueblo boliviano reclame dólares como la gran necesidad para garantizar el bienestar y la paz social. Es entendible que así sea, gracias a los ingresos extraordinarios que tuvimos en dicho periodo la economía creció y el consumo interno se multiplicó, requiriendo, tanto para la producción como para el comercio del cual vive gran parte de la población que subsiste desde la informalidad, bienes importados, ya sea como insumos o como productos de consumo final.
Aunque distintas medidas de política económica elevaron los costos de transar en dólares y fomentaron el uso de la moneda nacional en la economía, las referencias de los precios siempre estuvieron dolarizadas. Es muy llamativo observar que, aunque se bolivianizaron la mayor parte de los ahorros, créditos y transacciones la mentalidad de la ciudadanía permaneció dolarizada, incluso entre aquellas generaciones que no habían nacido o eran niños durante la crisis de la hiperinflación del periodo 1982 – 1985, que constituyen la mayoría de la población actual.
Volviendo a la demanda del productor agropecuario de San Julián, la biotecnología es imprescindible para la seguridad alimentaria, el desarrollo económico y el establecimiento de bases sostenibles para la recuperación económica y la generación de las divisas que necesita el país. El sector productor de alimentos es uno de los pocos que tiene una capacidad de reacción inmediata para incrementar las exportaciones y generar nuevas divisas.
La biotecnología nos permitiría multiplicar la producción con la misma superficie agrícola, disminuir el uso de agroquímicos y resistir mejor las adversidades climatológicas que estamos enfrentando. Si estos productores bloquearon para demandar su uso es porque experimentan en carne propia las grandes pérdidas que les ocasionó la sequía en los últimos años y cuyos cultivos podrían haber resistido si hubieran tenido acceso a la biotecnología.
La oposición a la biotecnología es una gran impostura. El mismo gobierno que la prohíbe importa trigo para subsidiar a los panificadores del occidente del país, por lo que el pan que se produce en la región andina de Bolivia está elaborado con harina de trigo producida con biotecnología sin que a nadie le haya afectado. Los mismos que se oponen se han vacunado contra La Covid gracias a vacunas desarrolladas con la biotecnología, y es que los beneficios de esta ciencia abarcan muchos campos de la salud, la alimentación y la industria, por lo que es absurdo que Bolivia se condene al subdesarrollo prohibiendo su uso cuando existe amplia evidencia internacional sobre sus desarrollos científicos y nosotros mismos la consumimos a diario.
Al mismo tiempo, el citado dirigente de San Julián, apuntaba al problema de fondo que ha limitado el desarrollo agropecuario y económico en general de Bolivia, la falta de libre mercado. Y señalaba bien porque en los últimos veinte años se han aprobado numerosos decretos y resoluciones que imponen cupos, regulan precios y establecen licencias previas de exportación, con lo cual se impusieron obstáculos que limitaron significativamente el crecimiento del sector alimentario del país, el cual recibió mayores ingresos, pero no incrementó significativamente los volúmenes de producción debido a dichas barreras legales.
Como se puede comprobar una y otra vez, gran parte de los problemas económicos que sufre Bolivia se solucionarían levantando barreras administrativas que nosotros mismos nos hemos impuesto por medidas que responden a la visión estatista y populista que predomina en el país desde hace más de 80 años.
IGNACIO VERA DE RADA
Hace mucho tiempo que no asistía a un curso que me gustara tanto. El pasado 6 de abril, Yamil Cárdenas, doctor en Inteligencia Artificial, impartió un curso de este campo del conocimiento en la Facultad de Ingeniería de la UCB, al que asistimos varios docentes del Departamento de Cultura y Arte. A medida que escuchaba la disertación, los porqués sobre los nuevos avances de la tecnología me daban vuelta la cabeza, aunque también me cuestionaba su para qué.
Hace mucho tiempo que no asistía a un curso que me gustara tanto. El pasado 6 de abril, Yamil Cárdenas, doctor en Inteligencia Artificial, impartió un curso de este campo del conocimiento en la Facultad de Ingeniería de la UCB, al que asistimos varios docentes del Departamento de Cultura y Arte. A medida que escuchaba la disertación, los porqués sobre los nuevos avances de la tecnología me daban vuelta la cabeza, aunque también me cuestionaba su para qué.
Tenemos repetido que el Estado “sobrevino” (no fue creado) como un instrumento coercitivo coactivo necesario para precautelar los intereses de una escasa minoría opulenta en detrimento de la inmensa mayoría de la población mundial.
En nuestro tiempo el Estado ya no le es suficiente a ese núcleo hegemónico por lo que ha resuelto eliminarlo sustituyéndolo con un nuevo sistema de poder total, aplastante y asfixiante, dándole un viro al capitalismo.
Tenemos repetido que el Estado “sobrevino” (no fue creado) como un instrumento coercitivo coactivo necesario para precautelar los intereses de una escasa minoría opulenta en detrimento de la inmensa mayoría de la población mundial.
En nuestro tiempo el Estado ya no le es suficiente a ese núcleo hegemónico por lo que ha resuelto eliminarlo sustituyéndolo con un nuevo sistema de poder total, aplastante y asfixiante, dándole un viro al capitalismo.
En un lejano país africano, Gasolandia, gobernado por dos jefes de la misma tribu por casi 20 años, se había descubierto un gran boicot contra la economía que era muy dependiente de un recurso natural.
En un lejano país africano, Gasolandia, gobernado por dos jefes de la misma tribu por casi 20 años, se había descubierto un gran boicot contra la economía que era muy dependiente de un recurso natural.
KATIUSKA VÁSQUEZ
San Matías, la última población que sienta soberanía antes de llegar al Brasil, se ha convertido en una herida del narcotráfico por el historial de asesinatos conectados con esa actividad —tan ilegal como dinámica— que se cometen y que retratan la violencia que está unida a este flagelo.
San Matías, la última población que sienta soberanía antes de llegar al Brasil, se ha convertido en una herida del narcotráfico por el historial de asesinatos conectados con esa actividad —tan ilegal como dinámica— que se cometen y que retratan la violencia que está unida a este flagelo.
El exembajador Víctor Manuel Rocha ha sido sentenciado a 15 años de cárcel el viernes 12 de abril, en Estados Unidos.
Además, deberá pagar medio millón de dólares como cuota de restitución al gobierno de los Estados Unidos. Dada su edad, 73 años, la condena de la justicia americana equivale a una cadena perpetua.
La jueza pidió además que se lo prive de la nacionalidad en EEUU. Morirá como colombiano.
El exembajador Víctor Manuel Rocha ha sido sentenciado a 15 años de cárcel el viernes 12 de abril, en Estados Unidos.
Además, deberá pagar medio millón de dólares como cuota de restitución al gobierno de los Estados Unidos. Dada su edad, 73 años, la condena de la justicia americana equivale a una cadena perpetua.
La jueza pidió además que se lo prive de la nacionalidad en EEUU. Morirá como colombiano.
FRANCESCO ZARATTI
Si me preguntaran qué pruebas de la resurrección de Jesucristo existen, sólo se me ocurrirían tres y ninguna de ellas contundente si se la aísla de la fe: la tumba vacía, las apariciones del Resucitado y una especie de “principio antrópico” (la expansión y subsistencia de la Iglesia cristiana durante 2 mil años, a pesar de ella misma).
Si me preguntaran qué pruebas de la resurrección de Jesucristo existen, sólo se me ocurrirían tres y ninguna de ellas contundente si se la aísla de la fe: la tumba vacía, las apariciones del Resucitado y una especie de “principio antrópico” (la expansión y subsistencia de la Iglesia cristiana durante 2 mil años, a pesar de ella misma).
Ahora es el ministro de justicia, Iván Lima, quien afirma que Evo Morales fue culpable de los hechos de 2019, incluidas las muertes de Senkata y Sacaba, y lo dice tres semanas después de la misma afirmación hecha por Álvaro García Linera.
No por mayor prestigio, sino por haber sido cómplice inmediato de aquellos hechos, lo dicho por el exvicepresidente viene a tener mayor peso, sin desmerecer lo dicho por el ministro Lima.
Ahora es el ministro de justicia, Iván Lima, quien afirma que Evo Morales fue culpable de los hechos de 2019, incluidas las muertes de Senkata y Sacaba, y lo dice tres semanas después de la misma afirmación hecha por Álvaro García Linera.
No por mayor prestigio, sino por haber sido cómplice inmediato de aquellos hechos, lo dicho por el exvicepresidente viene a tener mayor peso, sin desmerecer lo dicho por el ministro Lima.
JORGE PATIÑO SARCINELLI
Si la población alfabetizada del planeta leyera en papel lo mismo que yo o tú, querido lector, acabaríamos con los bosques de la tierra en pocos años. Cuando me enteré de este dato asombroso, hace unos 20 años más o menos, las opciones electrónicas apenas existían, pero con el tiempo me he ido moviendo hacia estos medios por fuerza de las circunstancias. No recuerdo la última vez que leí un periódico en papel y ya no extraño su tinta en las manos.
Si la población alfabetizada del planeta leyera en papel lo mismo que yo o tú, querido lector, acabaríamos con los bosques de la tierra en pocos años. Cuando me enteré de este dato asombroso, hace unos 20 años más o menos, las opciones electrónicas apenas existían, pero con el tiempo me he ido moviendo hacia estos medios por fuerza de las circunstancias. No recuerdo la última vez que leí un periódico en papel y ya no extraño su tinta en las manos.
MARCELO GONZALES YAKSIC
Ni siquiera se ha propuesto alguna solución para la grave crisis económica, pero el Gobierno sí está en la tarea de recaudar a la fuerza los impuestos vigentes y los que se encuentran en mora sólo para cubrir las deudas en salarios que tiene con sus “fieles” servidores públicos. El gasto astronómico mensual tiene como única fuente el bolsillo del grupo económico de los empresarios y prestadores de servicios que pertenecen al sector formal, ya de por sí muy presionado de una manera irracional.
Ni siquiera se ha propuesto alguna solución para la grave crisis económica, pero el Gobierno sí está en la tarea de recaudar a la fuerza los impuestos vigentes y los que se encuentran en mora sólo para cubrir las deudas en salarios que tiene con sus “fieles” servidores públicos. El gasto astronómico mensual tiene como única fuente el bolsillo del grupo económico de los empresarios y prestadores de servicios que pertenecen al sector formal, ya de por sí muy presionado de una manera irracional.
Para entender y actuar en economía, en los aspectos más básicos e importantes, no se requiere mucha ciencia. He conocido analfabetos comerciantes y empresarios significativamente prósperos. Ellos se guían con la lógica de dos de los factores más básicos e importantes en economía: los ingresos y los gastos.
Para entender y actuar en economía, en los aspectos más básicos e importantes, no se requiere mucha ciencia. He conocido analfabetos comerciantes y empresarios significativamente prósperos. Ellos se guían con la lógica de dos de los factores más básicos e importantes en economía: los ingresos y los gastos.