El hecho de que el presidente del Estado regale un vehículo motorizado robado es ya motivo de oprobio, pero la actitud de algunos altos funcionarios del Gobierno al respecto agrava lo lamentable del asunto, y suscita reflexiones acerca de la magnitud que alcanzan las prácticas ilegales en las instancias del Estado.
“No es un hecho estructural”, decía el vocero presidencial refiriéndose a que la vagoneta entregada,en calidad de donación, por el presidente Luis Arce al Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq) era objeto de una denuncia de robo en Chile.
Ese “hecho sensible”, como lo denomina el vocero, sería desconocido hasta hoy si el Conamaq no hubiera decidido legalizar la tenencia del vehículo, trámite que requiere una certificación de la Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove) que depende de la Policía Boliviana.
Esa organización afín al partido de gobierno recibió el vehículo robado en octubre del año pasado e inició los trámites de regularización de propiedad.
“Recién el 2 de mayo de 2023, nos llega la notificación de que el vehículo había tenido una procedencia de carácter robado”, señalaba el jiliri Apu Mallku del Conamaq al informar públicamente que decidieron devolverlo.
No es el único motorizado en esas condiciones de ilegalidad que el Ministerio de la Presidencia dispuso en donación. Otro fue hallado en el estacionamiento de la sede de la Asamblea Legislativa, no como resultado de alguna acción policial, sino por denuncia de una diputada de la oposición.
“Oportunismo político” califica el vocero del presidente a las críticas manifestadas por los opositores que, según él, intentan mostrar estos casos “como un hecho estructural del Gobierno”.
Esos dos casos involucran directamente al Ministerio de la Presidencia que, virtud de un decreto, recibe los vehículos decomisados por la Aduana Nacional y dispone de ellos.
“La mayor cantidad de vehículos que vienen a Bolivia son de la república de Chile (donde) existe este tipo de robos al interior de su país (...) es responsabilidad de cada país cuidar sus límites y cuidar la propiedad de sus ciudadanos”, sentencia la presidenta de la Aduana acerca del tema.
La página de Facebook del Grupo de Búsqueda de Vehículos (GBV) de Chile contiene una lista de 5.000 motorizados robados en ese país que ahora están en Bolivia, señala el director y fundador de esa organización, un expolicía chileno que hace meses ayudó a recuperar otros en similar condición.
Quizás algunos de esos 5.000 están entre los 32 autos donados por Luis Arce a organizaciones afines al MAS, desde el 23 de enero de 2021. Pero, ¿quién lo verificará?
