Un nuevo hecho de tránsito ocurrido el pasado sábado en la carretera a Tarija, en la zona conocida como el Tojo, dejó luto en las familias y más 40 heridos después de que un bus se embarrancó por causas que aún se investigan.
El siniestro es una muestra más de que los accidentes son un problema apremiante en nuestro medio sin que se tengan planes claros para reducir las lamentables estadísticas que cada año se presentan.
Uno de los últimos reportes de la Policía da cuenta de que cada día al menos cuatro personas pierden la vida por accidentes de tránsito en Bolivia.
De acuerdo con los datos, en lo que va de la gestión 2024 unas 1.400 personas han fallecido en siniestro viales, principalmente, por atropellos.
“Con bastante alarma nosotros vemos que en el transcurso de este año se han registrado más de 15.000 siniestros de tránsito, entre los más frecuentes están las colisiones y los atropellos a peatones”, lamentó el director nacional de Tránsito, Omar Zegada.
A nivel de la Comunidad Andina de Naciones, Bolivia es el país con más siniestros viales tuvo en las zonas rurales en 2023 con el 12 por ciento, después estuvo Ecuador con el 10 y el Perú con el 6.
La cobertura que realizan los seguros como Univida de las víctimas es otro indicador de que estamos ante un problema creciente en nuestro medio.
El último informe de la empresa de seguros Univida confirma el impacto de los accidentes en el país. En cinco años, entre 2017 y 2024, vendió 11,6 millones de rosetas del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) a los motorizados, y atendió a 160 mil accidentados.
De acuerdo con el informe más reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cifra anual de defunciones por accidentes de tránsito se ha reducido. Sin embargo, 1,19 millones de personas fallecen cada año por esta causa.
Las cifras de los accidentes deben ser un llamado de atención para fortalecer los planes de prevención. Además, demuestran que es necesario insistir en que se realicen más controles en las carreteras y vías urbanas para reducir los hechos.
El organismo recomienda mejorar la legislación y normas de seguridad reduciendo los factores de riesgo como la conducción en estado de ebriedad, el exceso de velocidad, el cinturón de seguridad, el uso del casco del motociclista y sistema de retención infantil.
La prevención y la educación vial figuran como las principales herramientas para evitar más muertes por hechos de tránsito.